Ejemplos con vezinas

Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.

Nunca tratan con parientes, con yguales a quien pueden hablar tú por tú, con quien digan: ¿qué cenaste?, ¿estás preñada?, ¿quántas gallinas crías?, llévame a merendar a tu casa, muéstrame tu enamorado, ¿quánto ha que no te vido?, ¿cómo te va con él?, ¿quién son tus vezinas?, e otras cosas de ygualdad semejantes.
Y como hasta que se hiziesse hora de comer se estuviesse en un patinillo della con las demás vezinas, entrando yo cierto día me dixo:.
Valiérale más no la desnudara, porque, a los muchos gritos de las vezinas, llegó la justicia y, viendo la muger en el suelo y llena de sangre, informándole de que por la calle abaxo yva y no poder aún llegar al esquina, corrieron a buscarle.
¿Qué diré de mis vezinas que también fueron combidadas? Diré que por baylar la una no se sentó, mas que, aunque la otra hizo platos, murmurando digo para dentro y fuera del lugar para amigas y enemigas, no por esso dexó de comer al passo que habló ella y bayló la otra.
Esto es lo que toca a mis vezinas.
Yo era recién entrado en aquella casa y, como tal, me admiré de lo que en ella avía, porque, si dixe era comedia y entremés, dixe bien, conocida la casa de Gonçalo y la de mis vezinas.
Baxéme a mi quarto, a cuyo pie de escalera estavan dos vezinas que otros ocupavan, la una baylando sin son, sólo con su sombra y la otra hablando con la que baylava sin que la oyesse nada de lo que la dezía.
Leýales gramática, y yo también la oía desde mi agujero, que pocas vezes salía de casa, porque en ella tenía entremés con lo que en el quarto de Gonçalo passava, y comedia con su música con otras dos vezinas que dentro de casa vivían, de quien también brevemente he de hablar.
Paréceme esto a lo que le sucedió a cierto hombre de muy buena intención, pero muy enfadado de las liviandades de las vezinas de casa, que, como no se atreviesse a dezirlas nada, le embió Dios una modorra en que dixo muy a su satisfación todo lo que le vino a la boca y no mintió en nada.
-Señor conde -dixo Patronio-, una muger fue que avié nombre doña Truana et era asaz más pobre que rica, et un día iva al mercado et levava una olla de miel en la cabeça. Et yendo por el camino, començó a cuidar que vendría aquella olla de miel et que compraría una partida de huevos, et de aquellos huevos nazçirían gallinas et depués, de aquellos dineros que valdrían, conpraría ovejas, et assí fue comprando de las ganancias que faría, fasta que fallóse por más rica que ninguna de sus vezinas.
- Bien tengo, señora, conoscimiento cómo todas tus razones, estas e las passadas, se endereçan en mi prouecho, pero, ¿cómo quieres que haga tal cosa, que tengo a quien dar cuenta, como has oydo e, si soy sentida, matarme ha? Tengo vezinas embidiosas.
Pues por cierto, de otra manera miro yo tus cosas, que hasta tus vezinas me parescen bien e se me alegra el coraçón cada vez que las veo, porque se que hablan contigo.
¿Ves aquí su puerta? Entremos quedo, no nos sientan sus vezinas.
- ¿Sin la conoscer? Quatro años fueron mis vezinas.
Tanto duró aquesta fiera e sobrecruel manera fasta que se estendió la fama por las e en las çercanas e vezinas çibdades e regiones e non osavan passar de los moradores alguno de ellas nin entrar por e en el regno de Traçia.
La cual con osadía e fuerça leonina gasta las vezinas virtudes e arriedra del omne en do se reposa toda compañia de buenas costumbres, queriendo paresçer mayor sin méritos entre aquéllos que mejor d'él lo meresçen e aun non conosçiendo sus proprias e manifiestas culpas e erroneamente estimándose o cuidando ser virtuosos e quererse honrar así como si lo fuesen çierto.
E resçibe aína aquella impresión por la oquedat suya que tira mucho cualesquier humidades vezinas, como paresçe en la casa regada, cuando la lana tira, maguer esté apartada, de lo regado.

© Todos los derechos reservados Buscapalabra.com

Ariiba