Ejemplos con prometes

Pues yo voy a traerte otro libro santo muy alegre, con tapas azules y letras de oro, si me prometes que leerás en él un poco todos los días.

Es una botella de aquellas que deseabas, borracho: tuya será cuando te pongas bueno, si prometes no decir disparates.

Pues bien, Isidoro, ya que tú me prometes que no te huirás más y que te portarás como hombre formal, haré que no te castiguen tanto, que no te hagan trabajar mucho, que te den bastante comida, y un cochino, y un conuco, y mujer con quien casarte.

Yo lo hiciera respondió Sancho, pero no soy nada codicioso, que, a serlo, un oficio dejé yo esta mañana de las manos, donde pudiera hacer las paredes de mi casa de oro, y comer antes de seis meses en platos de plata, y, así por esto como por parecerme haría traición a mi rey en dar favor a sus enemigos, no fuera contigo, si como me prometes docientos escudos, me dieras aquí de contado cuatrocientos.

- ¿Pero no me lo prometes? -exclamó Marius.

¿Me lo prometes?.

¿Con que lo pensarás, Luciíta? ¿Me prometes pensarlo?.

Yo le dije a mi Ley, después de arroparle bien y darle unas sopas en vino: «Hoy es domingo, Ley: si tú me prometes estarte aquí bien tapadito, sin que te entren tentaciones de echarte fuera, yo me voy a la iglesia que campanea, y en ella oiré misa y daré gracias a Dios por haberte curado.

-¿Y me prometes.

¿Prometes esperarme aquí?.

, si me prometes devolvérmelos pronto, podré buscarte mil.

Y si te portas bien, si haces lo que te mande, si me prometes trabajar y no salir de noche, te daré algo.

-En cambio, si esto se queda así, si me prometes no volver a poner los pies en esta casa, habrá paz, tu mujer no sabrá nada, y puedes dedicarte tranquilamente a la vida pública.

Si me prometes ser hombre de bien, ser arreglado y económico, te auxiliaré con un poco de.

-Pues si es así -respondí yo-, dítela a ti mismo, y solicítate a ti, y cumplirás lo que prometes.

-¿Y quién eres tú, que sabes lo que aun yo mismo no sé, y que asimismo me prometes remedio, cuando le hallo tan dificultoso? ¿Qué puedes tú hacer, cuando aún al demonio es imposible?.

conocido a fondo, ¿imaginas tal vez que podrás seducirme de nuevo? ¡Me prometes la vida! ¿Y a qué.

¿me prometes, chiquilla, no incomodarte?.

Prometes mucho, nada no cumples, échasnos de ti, porque no te podamos pedir que mantengas tus vanos prometimientos.

Grano-de-Belleza le dijo: ¡Oh princesa! ¿Me prometes siquiera volver a llevarme a Iskandaria? Ella dijo: Es lo más fácil.

-En ese caso ¿me prometes tener presente tus compromisos y enviarme diariamente noticias suyas?.

Lo que hay es que la haces falta: a su edad y con sus males, ya no puede esperar hijo más de su gusto, como cuando nació tu hermano, y como eres hermosa y expansiva y discreta, y prometes mucho para brillar en la carrera que ella está terminando, ve en ti, con la supuesta obligación de acompañarte, un hermoso pretexto para no retirarse del mundo cuando más enamorada está de él.

-Ni yo quiero que lo consientas, ni tampoco quiero que pase, y si tú me prometes que te enmiendas, yo te prometo que yo jago que esta noche venga tu José, pero ya sabes que yo te jago este favor con la condición de que de aquí pa alante cuide más y mejor la jaza de tus quereles.

-¿Me prometes, si te lo confieso, responderme con la misma franqueza a las preguntas que yo te haga después?.

De modo que si en las historias que nos prometes se explica esa moda con otros pormenores desconocidos para mí, puedes empezar enseguida.

Y el rey Schahriar contestó: ¡Oh Schehrazada! ¡Hazme olvidar esa tristeza y hazme saber el título de esa historia que me prometes! y Schehrazada dijo: Es la HISTORIA MÁGICA DE LA PRINCESA BUDUR LA LUNA MÁS BELLA ENTRE TODAS LAS LUNAS.

DONCELLA No cumplirás lo que prometes hora.

-Cómo no, si prometes y luego no cumples.

-Si me prometes oírme sin enfadarte conmigo, ni con nadie -dijo ella subrayando esta palabra con una sonrisilla algo forzada-, yo te referiré el caso con todos sus pormenores, que no dejan de ser de importancia.

Siempre prometes en duda, pues a dar nadie te ayuda.