Ejemplos con olvidaba

¡Y estaba cansado de oír hablar de ciertos caciques de aldea, perpetuos muñidores electorales, para quienes es una fiesta acompañar candidatos, y comer acá, y cenar allá, y desayunarse en el otro lado con ellos y a sus expensas, y frecuentemente un negocio cada elección después de cada ! Pues de todo esto se olvidaba don Simón al verse rodeado de tanto.

Me olvidaba de que esto es también estanco donde se venden los sellos de franqueo.

Y dicho queda con esto que la tal cuestión apenas se olvidaba un punto.

¡Ah! sí, Gertrudis,respondió el cura,se me olvidaba lo ví, hablé con él, está triste, muy triste, pero vendrá, me lo ha prometido.

Anselmo, ni aun en la fuga del más ardiente disputar, ni en la mayor violencia de sus ataques, se olvidaba de velar y de mitigar su rudeza con la dulzura de la forma.

A pesar del estado de mi ánimo y del abatimiento de mi espíritu, cuando tejía con ella la red de viva plática, recobraba yo mi buen humor de otro tiempo, y me volvía alegre y jovial, y me olvidaba de esas enervantes melancolías que han sido, y acaso todavía lo son, nota sombría de mi carácter, de este carácter mío soñador y lánguido, dado a la pereza y al fantaseo, al delirio vago y a la meditación sin objeto.

Oye: ¡se me olvidaba! ¿Quieres tomar chocolate? ¡Con franqueza! Si quieres llamaré a María para que te haga el chocolatito.

, en sus días de murria, cuando no tenía un real, y se olvidaba de los grandes autores del siglo de Augusto, y renegaba de Villaverde, y no se le daba un ardite la susodicha empresa del glorioso blasón, me decía de sus paisanos:.

Porque se me olvidaba decir que he andado.

De pronto el farmacéutico mudó el tema: ¡Ah!, me olvidaba de lo mejor.

Adiós, que haya salud ¡Ah!, me olvidaba: cuidado con los tiestos de la ventana.

¡Ah! Se me olvidaba decirte otra cosa.

No inspiraba simpatías Mauricia a todos los que la veían, pero el que la viera una vez, no la olvidaba y sentía deseos de volverla a mirar.

A mi boticarito me atengodijo después que echó el Padre Nuestro por las ánimas, de que no se olvidaba nunca.

Lo que la señora debía haber hecho hoydijo Estupiñá sofocado, y fingiéndose más sofocado de lo que estaba, es traerse una lista de cosas, y así no se nos olvidaba nada.

Pero se me olvidaba decirte que Caballuco está esperando para hablarte.

En Dios y en mi conciencia respondió el Diablo que no miraba en ello, porque traigo en tantas cosas divertidos los pensamientos, que de la principal a que venía se me olvidaba.

Con esto, andaba tan solícito y tan contento que se le olvidaba la pesadumbre de caminar a pie.