Sinónimos de Masaca

A continuación se muestran los Sinónimos de masaca ordenados por sentidos. Si tienes duda sobre alguna palabra, puedes hacer clic sobre ella para conocer su significado.

Sinónimos de masaca

Masaca Como sustantivo, aumentativo de masa.

1 En el sentido de Cuerpazo

Ejemplo: No he visto a un bebedor de sol que no tenga la piel lustrosa, y un cuerpazo bien nutrido y mejor descansado.

  • Cuerpazo aumentativo de cuerpo, sustantivo masculino, aumentativo de cuerpo

2 En el sentido de Pastaza

Ejemplo: pastaza es una provincia del Ecuador, situada en la Región Amazónica.

  • Pastaza aumentativo de pasta, sustantivo femenino, aumentativo de pasta

3 En el sentido de Minona

  • Minona aumentativo de mina, sustantivo femenino, aumentativo de mina
  • Venata aumentativo de vena, sustantivo femenino, aumentativo de vena
  • Vetona aumentativo de veta, sustantivo femenino, aumentativo de veta
  • Venerato aumentativo de venero, sustantivo masculino, aumentativo de venero

4 En el sentido de Basón

  • Basón aumentativo de base, sustantivo femenino, sustantivo masculino, aumentativo de base
  • Principiato aumentativo de principio, sustantivo masculino, aumentativo de principio
  • Materialote aumentativo de material, sustantivo masculino, aumentativo de material

5 En el sentido de Publicaco

  • Publicaco aumentativo de público, sustantivo masculino, adjetivo masculino, aumentativo de público

6 En el sentido de Papillota

  • Papillota aumentativo de papilla, sustantivo femenino, aumentativo de papilla

7 En el sentido de Pelotón

Ejemplo: Es un comandante de campo del pelotón D y viejo amigo de Hondo.

  • Pelotón aumentativo de pelota, sustantivo femenino, sustantivo masculino, aumentativo de pelota
  • Pellona aumentativo de pella, sustantivo femenino, aumentativo de pella

8 En el sentido de Montonón

Ejemplo: Muy amable. dijo con voz melosa y ojos tan iluminados de pispiretos que me acabó de remachar el flechazo que yo trataba de que no se diera cuenta, pero... Era re’colmilludo... Luego pasó todo como tú lo dices. Como lo vieron trabajar con esmero en la instalación de las nuevas tuberías, le dijeron que pusiera también irrigadores en el jardín, le pusiera bombas a las dos fuentes que había y colocara una tarja en el patio pa’ la limpieza. Siempre se le veía re’alegre en sus chambas. Como que tenía un don de caer bien, los señores no se apretaban para charlar con él. Un día el patrón le dijo que era muy caro lo que cobraba y el plomo le comentó que por eso él le echaba ganas al trabajo pa’ que todo saliera perfecto y no hubiera ningún reclamo, no le gustaba quedar mal, pues todo lo que cobraba era para gastárselo, no para tener que devolverlo. El patrón sonrió y dijo que lo felicitaba porque eso era saber vivir. Cuando terminó, le pagaron un buen billete y yo acabé con él, en un hotel de la Guerrero. Lo bueno es que pude abortar y nadie se dio cuenta de mi mala pata. Le dije que se casara conmigo, pero él me supo convencer que eso de los papeles mata el amor. Lo ha de haber oído en alguna telenovela pa´ zafarse. Yo ya había leído algo de eso en Historias del corazón, esa revista de monos que salía entonces. Así que... Fue cuando tú me bronqueastes porque decías que era tu novio. No sé a ti, pero él me desconchavó y no le guardo rencor, ya qué vamos a estar reclamando, si estamos re’viejas, mas bien como que me da lástima, porque ya ves cómo se le fue la juventud, ya no es ni sombra de lo que era. Siempre pensando en el dinero. Nos la doraba al decir que no podía casarse, sino hasta que tuviera un buen capital. Si querías seguir, órale. Si no, a’i te ves. No quiero compromisos. Y se iba siempre como obsesionado en la lana que en la semana tendría. Hacía de planes que... Tú te quedabas de a seis en si debías aceptar sus condiciones o mandarlo a la fregada, y cuando ya estabas decidida, no lo volvías a ver. Se daba a desear el güey. No sé de dónde sacaba esa idea de hacerse rico, si todo se lo despilfarraba, según supe después, en el chupe y en un montonón de viejas. Según tú, en esos días, yo te lo había quitado, pero andaba también con la del puesto de periódicos, con la frutera, con la de los caldos y hasta con la de las garnachas. Eso sí, siempre todo lo pagaba él. Decía que para eso le taloneaba toda la semana. No era ningún padrote. Su orgullo, pues qué. Por cada pago que recibía, así me lo dijo una noche, encontraba algo así como la fuente de la felicidad, y se sentía como dueño del mundo y calientísimo para... tú sabes... Lo malo era que se emborrachaba mucho y luego que te cogía, se quedaba dormido. Yo en desquite, no se iba a burlar de mí, en los dos o tres meses que anduve con él, cuando ya lo veía jetón, lo bolseaba y le sacaba casi toda la lana que se había ganado en la semana. Cuando despertaba ni se acordaba. Creía que todo se lo había gastado en la borrachera y entonces yo me ponía dadivosa y le disparaba con su propia correa el caldo de gallina o el menudo y su cheve bien fría. Le hacía creer, como él a mí, que era dichosa. Y lo que sí, pa’ qué no decirlo, cuando le pagaban otra vez, me devolvía muy cumplidito la lana gastada. Decía que no le gustaba que las viejas pagaran. Así, haciéndome la loca, yo recuperaba lo que era de él, como mío.

  • Montonón aumentativo de montón, sustantivo masculino, aumentativo de montón

9 En el sentido de Jugón

Ejemplo: -Vaya, que el diañu seis las mozas de ahora. Ca día vos ponéis un amenículo nuevo. De modo y manera que una se despistoja para cortar bien un vestido, y al cabo le salen a usté con que le falta esto o le falta lo otro, y de que no está al estilo, y que torna y que vira. ¡María, hija! Endenantes daba gusto: sabía usté que la mejor gala de una moza era la saya de baeta y el jugón de alepín respulgao de pana. De dos tirones amañaba usté los paños de la saya, hilvanaba usté los plegues, la ponía sobre el jergón, y mejor debajo de un colchón si la cama le tenía, dormía usté tres o cuatro veces encima, y la sacaba usté que daba gloria verla puesta, de cómo caían aquellos plegues. Pero ¡ya te quiero un cuento hoy! ¡El Señor me valga! Ya too el mundo quier el vestío, y tan aina angosto de manga como ancho, tan aina con floriqueteo por las muñecas, como con trencillas por abajo. ¡Como que no pierdo romería ni mercao por el aquél de ver lo que se usa y poder estar al tanto del estilo pa servir a estas chapuceras presomías!... Y entovía rejonfuñan... porque, las condenas de ellas, ca una quier una cosa diferente y trae un antojo destinto... Malos demónchicos vos lleven nunca ni no... que si no fuera porque, aunque me esté mal el decirlo, sé cumplir con mi obligación, muchas veces había de pensar que se me había olvidao coger las tiseras en la mano. Dimpués de too, si habiesis ganao algo en el cambio, juera too por Dios, pero el Señor no mampare si no paicéis sandifesios con los mingorondangos de abora. ¡Josús, hijas, quién vos vio con aquellos rutajos de endenantes tan asentaos al cuerpo y tan plegaos, y quien vos vei con esos etelajes de señoras mal acomparás, que si vos los coge una barda en da que calleja, vos deja esnugas en un periquete... ¡Si vos digo que tien que ver!

  • Jugón aumentativo de jugo, sustantivo masculino, aumentativo de jugo

10 En el sentido de Lavaza

Ejemplo: En el último patio de la cárcel, encerrado por bajo muro de campo, que lo dividía del huerto, tres mujeres vestidas de mezclilla azul, se inclinaban a lavar en un pozo de bajo brocal lleno de lavaza.

  • Lavaza aumentativo de lava, sustantivo femenino, aumentativo de lava
  • Escoriaza aumentativo de escoria, sustantivo femenino, aumentativo de escoria

11 En el sentido de Turbata

  • Turbata aumentativo de turba, sustantivo femenino, aumentativo de turba
  • Vulgato aumentativo de vulgo, sustantivo masculino, aumentativo de vulgo

12 En el sentido de Bultaco

Ejemplo: Así, por intermedio de bultaco Records, su propio sello, editó Groncho -entre otros lados B y remixes-.

  • Bultaco aumentativo de bulto, sustantivo masculino, aumentativo de bulto

13 En el sentido de Carnaza

Ejemplo: La carnaza amontonada de muchos años de confesonario.

  • Carnaza aumentativo de carne, sustantivo femenino, aumentativo de carne

14 En el sentido de Corazonazo

Ejemplo: Al día siguiente fui al cerro, solo, y me arrodillé al lado de la verja de madera con que se había rodeado una modesta crucecita que recordaba el sitio del asalto. Allí recé por el alma de Juan Neira, el más valeroso, bueno y leal de los servidores. ¡Qué corazonazo tan grande había en ese cuerpo tan robusto!

  • Corazonazo aumentativo de corazón, sustantivo masculino, aumentativo de corazón
  • Nucleón aumentativo de núcleo, sustantivo masculino, aumentativo de núcleo
  • Focorro aumentativo de foco, sustantivo masculino, aumentativo de foco

15 En el sentido de Estratón

Ejemplo: A este estratón.

  • Estratón aumentativo de estrato, sustantivo masculino, aumentativo de estrato

16 En el sentido de Gentión

  • Gentión aumentativo de gentío, sustantivo masculino, aumentativo de gentío

17 En el sentido de Pastelón

Ejemplo: Y volviendo a poner la tapa al pastelón, se bajaron a las calles.

  • Pastelón aumentativo de pastel, sustantivo masculino, aumentativo de pastel
  • Tortona aumentativo de torta, sustantivo femenino, aumentativo de torta
  • Bollón aumentativo de bollo, sustantivo masculino, aumentativo de bollo

18 En el sentido de Depositato

  • Depositato aumentativo de depósito, sustantivo masculino, aumentativo de depósito

19 En el sentido de Moleón

Ejemplo: Los límites del barrio son las calles Coronel Schweitzer, prolongación de Teniente Cantaluppi, Monseñor moleón Andréu, la Avda.

  • Moleón aumentativo de mole, aumentativo de mole

20 En el sentido de Gentión

  • Gentión aumentativo de gentío, sustantivo masculino, aumentativo de gentío
  • Vulgato aumentativo de vulgo, sustantivo masculino, aumentativo de vulgo

21 En el sentido de Montonón

Ejemplo: Muy amable. dijo con voz melosa y ojos tan iluminados de pispiretos que me acabó de remachar el flechazo que yo trataba de que no se diera cuenta, pero... Era re’colmilludo... Luego pasó todo como tú lo dices. Como lo vieron trabajar con esmero en la instalación de las nuevas tuberías, le dijeron que pusiera también irrigadores en el jardín, le pusiera bombas a las dos fuentes que había y colocara una tarja en el patio pa’ la limpieza. Siempre se le veía re’alegre en sus chambas. Como que tenía un don de caer bien, los señores no se apretaban para charlar con él. Un día el patrón le dijo que era muy caro lo que cobraba y el plomo le comentó que por eso él le echaba ganas al trabajo pa’ que todo saliera perfecto y no hubiera ningún reclamo, no le gustaba quedar mal, pues todo lo que cobraba era para gastárselo, no para tener que devolverlo. El patrón sonrió y dijo que lo felicitaba porque eso era saber vivir. Cuando terminó, le pagaron un buen billete y yo acabé con él, en un hotel de la Guerrero. Lo bueno es que pude abortar y nadie se dio cuenta de mi mala pata. Le dije que se casara conmigo, pero él me supo convencer que eso de los papeles mata el amor. Lo ha de haber oído en alguna telenovela pa´ zafarse. Yo ya había leído algo de eso en Historias del corazón, esa revista de monos que salía entonces. Así que... Fue cuando tú me bronqueastes porque decías que era tu novio. No sé a ti, pero él me desconchavó y no le guardo rencor, ya qué vamos a estar reclamando, si estamos re’viejas, mas bien como que me da lástima, porque ya ves cómo se le fue la juventud, ya no es ni sombra de lo que era. Siempre pensando en el dinero. Nos la doraba al decir que no podía casarse, sino hasta que tuviera un buen capital. Si querías seguir, órale. Si no, a’i te ves. No quiero compromisos. Y se iba siempre como obsesionado en la lana que en la semana tendría. Hacía de planes que... Tú te quedabas de a seis en si debías aceptar sus condiciones o mandarlo a la fregada, y cuando ya estabas decidida, no lo volvías a ver. Se daba a desear el güey. No sé de dónde sacaba esa idea de hacerse rico, si todo se lo despilfarraba, según supe después, en el chupe y en un montonón de viejas. Según tú, en esos días, yo te lo había quitado, pero andaba también con la del puesto de periódicos, con la frutera, con la de los caldos y hasta con la de las garnachas. Eso sí, siempre todo lo pagaba él. Decía que para eso le taloneaba toda la semana. No era ningún padrote. Su orgullo, pues qué. Por cada pago que recibía, así me lo dijo una noche, encontraba algo así como la fuente de la felicidad, y se sentía como dueño del mundo y calientísimo para... tú sabes... Lo malo era que se emborrachaba mucho y luego que te cogía, se quedaba dormido. Yo en desquite, no se iba a burlar de mí, en los dos o tres meses que anduve con él, cuando ya lo veía jetón, lo bolseaba y le sacaba casi toda la lana que se había ganado en la semana. Cuando despertaba ni se acordaba. Creía que todo se lo había gastado en la borrachera y entonces yo me ponía dadivosa y le disparaba con su propia correa el caldo de gallina o el menudo y su cheve bien fría. Le hacía creer, como él a mí, que era dichosa. Y lo que sí, pa’ qué no decirlo, cuando le pagaban otra vez, me devolvía muy cumplidito la lana gastada. Decía que no le gustaba que las viejas pagaran. Así, haciéndome la loca, yo recuperaba lo que era de él, como mío.

  • Montonón aumentativo de montón, sustantivo masculino, aumentativo de montón
  • Pilona aumentativo de pila, sustantivo femenino, aumentativo de pila

22 En el sentido de Pastelón

Ejemplo: Y volviendo a poner la tapa al pastelón, se bajaron a las calles.

  • Pastelón aumentativo de pastel, sustantivo masculino, aumentativo de pastel

23 En el sentido de Pueblón

Ejemplo: Y más allá, el pueblón de Villabrava negreando entre las siluetas de sus torres, y luego, luego más bruma, más bruma aún: la bruma del mar, la lejanía, y en la grisácea lejanía destacándose la espesa columna de humo de un vapor que se acercaba al puerto.

  • Pueblón aumentativo de pueblo, sustantivo masculino, aumentativo de pueblo
  • Barrón aumentativo de barro, sustantivo masculino, aumentativo de barro
  • Lodón aumentativo de lodo, sustantivo masculino, aumentativo de lodo
Sinónimo de masaca

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