Ejemplos con quisieras

Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.

Dije, es obvio lo que hay que hacer: si tienes esas tres terminales, debería haber una terminal que fuese a donde sea que quisieras ir y en donde tengas interactividad.
¡Eres tú la flor de la canela! Mira, estoy loca de contenta y si quisieras.
Yo soy quien te pido perdón, por haber sido atrevido contigo, y por haber estorbado quizás en aquel tiempo que tu quisieras al que te dictaba tu corazón.
Viejito mío, di que me perdonas ¡Ay, si tú quisieras! ¡si tú quisieras!.
¡Qué importa! Te digo que quisiera morirme Daría con gusto la vida por que no quisieras a Gonzalo ¿Le quieres, corazón mío, le quieres mucho?.
Si tú hicieras comedias y quisieras sacarme en una, deberías titularla:.
Desperté llorosa y apenada, como si ya no me quisieras, como si no hubiera de verte más.
¡Bueno es él para levantarse tan temprano! Si tú quisieras, Rorró, irías con nosotras.
¡Eres un mandria, anda, bayeta, si me quisieras de veras, no tendrías miedo a la estantigua de tu mujer!.
—¡Ya me quisieras ahora, infame! Yo te hallé siempre pura y hermosa, pero tú me abandonaste por otros espejos más dorados, que marchitaron tu pureza y hermosura.
Si me quisieras contar algo más de aquello indicó Jacinta, cuando vagaban por las solitarias y románticas calles que se extienden detrás de la catedral.
Si quisieras volver a otra hora.
No, hija, has acudido tarde ¡Te he estado metiendo la indulgencia por los ojos, sin que tú la quisieras ver, y ahora que te ahogas, vienes a mí! ¡Ay!, no puedo, no puedo.
Eso quisieras tú para darte tono.
ya no harán fuego, eh? ¿Habrá peligro en andar por aquí? Si quisieras acompañarme.
Pero, ¡ah!, Martincillo, si tu quisieras seguir mis consejos.
Eso es lo que tú quisieras, que te dejase maltratar al pobre caballo.
¿Te da envidia? ¿Quisieras que se metiera a fraile? ¿Por qué le celas?.
Si tú me quisieras como dices no harías ciertas cosas.
—¿Casada yo, malino? respondió la Cariharta, mira en qué tecla toca, ya quisieras tú que lo fuera contigo, y ántes lo seria yo con una notomía de muerte, que contigo.
De mí te sé decir que si quisieras paga por los azotes del desencanto de Dulcinea, ya te la hubiera dado tal como buena, pero no sé si vendrá bien con la cura la paga, y no querría que impidiese el premio a la medicina.
Quisieras tú que lo diera del asno, del mentecato y del atrevido, pero no me pasa por el pensamiento: castíguele su pecado, con su pan se lo coma y allá se lo haya.
-¿Quisieras tener el afrecho? -preguntó el caballo.
¡Oh si tú me quisieras cual te adoro!.
Te brindé con éste mío, desconfiando mucho, en verdad se diga, de que me quisieras el envite, hecho de todo corazón, porque barruntaba tu modo de vivir y conocía tu estampa por retratos que me habías ido mandando.
¿Si tu mujer se te escapase, y tú la quisieras?.
¡La juventud! Tú quisieras recobrarla para coquetear o flirtear, como ahora dicen, y yo para digerir bien y no acordarme de que ha existido la cochina letra impresa, ni aprender siquiera a deletrear.
¿Si quisieras esperar? aventuró tímidamente el fondero.
Ya ves que nada se pierde y que estaríamos siempre en tiempo de recuperarla, si quisieras.

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