Ejemplos con frentes
Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.
Los depósitos de agua, piscinae o stagna, que actúan como reguladores de la corriente suministrada por los canales de abastecimiento y envían el agua a los diferentes frentes de laboreo.
Una iniciativa que llegó a crear más de mil escuelas en los frentes y que hasta la llegada de Segundo Blanco al Ministerio de Instrucción Pública estuvo dirigida y protagonizada en todos los órdenes, clases, conferencias, cursillos, charlas, sesiones de cine, periódicos murales, teatro, emisiones de radio, bibliotecas, academias e internados militares.
Nos quedaría para finalizar hacer un breve balance de las múltiples actividades desarrolladas por la FETE en los frentes de lucha y en la retaguardia, configurando en conjunto una cultura de combate en la que el sindicato dejó impreso lo mejor de sí y de sus militantes.
Finalmente, la desorientación de no pocos profesionales de la enseñanza ante la nueva situación, las propias circunstancias bélicas y sus efectos, que alcanzaron también a los alumnos, al material escolar y a la misma actividad educativa diaria, el alto absentismo escolar en las zonas próximas a los frentes de lucha, la utilización temporal de escuelas para fines de guerra, etc.
Previamente, en fecha no determinada, los remates de herrería situados sobre la cornisa, entre las coronaciones de los frentes de ventanas de la planta superior, fueron sustituidos por paños de ladrillo cara vista que alteran la primitiva percepción de dichas coronaciones, recortadas sobre el cielo, y restan singularidad compositiva al lienzo de muro de primera planta, único elemento del edificio resuelto en ese mismo material.
El volumen exterior presenta muros de mampostería en casi la totalidad de la altura de los distintos frentes que han sido parcialmente reedificados.
En los demás frentes del edificio los vanos son adilentados y se organizan con menos rigurosidad.
El resto que no fueron nombrados oficiales nutrieron buena parte de la primera línea de combate de Falange en los distintos frentes en los que combatió en la guerra, por lo que fue amplio el número de bajas.
El sol subía y sus rayos comenzaban a travesear en los cristales del coche, y en las frentes de los dos que lo ocupaban, como invitándoles a contemplarse el uno al otro.
Todas las frentes se inclinaban bajo el peso de severos pensamientos, todos los hombres parecían tener en aquel instante treinta años más.
Sus palabras llevaban el desquite: parecía como si con un manojo de lirios azotara las frentes de los pecadores: sus anatemas eran alfileres con alas.
Hay algo de tenebroso y de inquietante en esas frentes cubiertas.
No, Adela, no le hagas caso: esas frentes cubiertas, me dan miedo.
Oh, no, Ana: ¿qué han de pensar ustedes más que jazmines y claveles? Pues que no, Pedro: rompa usted las frentes, y verá dentro, en unos tiestitos que parecen bocas abiertas, unas plantas secas, que dan unas florecitas redondas y amarillas.
Instintivamente, movida por el dolor, se agarró también a los rubios pelos de la hilandera, y durante algunos minutos se las vió a las dos encorvadas, lanzando gritos de dolor y rabia, con las frentes cerca del suelo, arrastrándose mutuamente con los crueles tirones que cada una daba a la cabellera de la otra.
¡Aaah! ¡El primer paso! Todas las frentes parecían inclinarse bajo el peso de un mismo pavoroso pensamiento Mas habló el ilustre marqués de Butrón, y al eco de su mágica palabra irguiéronse las nobles cabezas y viéronse allí ilustres vendeanos dispuestos a disputar palmo a palmo el terreno, garridas Marfisas y Bradamantes, capaces de realizar con el brillo de sus ojos las proezas de aquellas heroicas amazonas de las primeras cruzadas.
Bronces antiguos, raras porcelanas, macetas de Pompeya con plantas tropicales, lámparas árabes, persas y romanas, igual una de estas a la célebre di capo danno del Museo Vaticano, bustos, cuadros, estatuas, yelmos, espadas, partesanas y armaduras completas de varias épocas rodeaban cual páginas sueltas de la historia de todos los tiempos el caballete de Currita, que, colocado en luz conveniente, parecía recibir un reflejo de la luz del cielo, que el grandísimo tuno de Celestino Reguera aseguraba ser el mismo, mismísimo que derramaba en otro tiempo el grupo de las nueve musas sobre las frentes de Rafael, Velázquez y el Ticiano.
