Ejemplos con aguijones

Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.

Esgrime un Lanzador de Aguijones, que inyecta poderosos virus de ordenador a sus enemigos.
Ofreció su opción de armamentos, lurker eligió más armas naturales - garras, láminas, y aguijones.
En ocasiones se presenta con aguijones.
Entre los animales es frecuente el aposematismo en especies dotadas de medios defensivos potentes, tales como aguijones o colmillos venenosos, o un sabor desagradable.
La característica distintiva de la familia es una pareja de espinas, una a cada lado de la cola, que son aguijones muy peligrosos.
Planta simple de reconocer por abundantes aguijones, hojas glaucas en el envés, y frutos alargados y pedunculados.
Generalmente corteza pardo amarillento o grisáceo, con aguijones.
Follaje abundante, siempreverde, ramas tortuosas, castaño grisáceas, con aguijones cónicos repartidos irregularmente, hojas imparipinnadas, presentando aguijones apareados presumiblemente en lugar de los folíolos, y son muy notables.
Zumbidores: Son robots clásicos similares a avispas que vuelan de una zona a otra por los aires, pausando solo para intentar disparar un pequeño proyectil amarillo desde sus aguijones.
Sus cascos disponen de pequeños aguijones que disparan descargas láser a pocos pasos de distancia.
Si ahí te acribillan las moscas, aguántalas con paciencia, y acuérdate de los que aquí sufrimos las picadas de los tontos que en este nefando Madrid con el calor se multiplican y aguzan sus penetrantes aguijones.
—Pero ¡qué poetisa!—Vedla sí, envenenada, mordaz, perversa, diabólica, esgrimir una pluma y una lengua comparables a dos aguijones.
El gigante que incendiaba lugares y destrozaba ejércitos no podía dar un paso sin encontrar un avispero, y frenético con aquel zumbido, envenenado por los aguijones, maldecía la hora de la invasión.
Destrozáronle eternamente mil recuerdos hiriéndole con más agudo puñal en el instante mismo que respiraba con la falaz ilusión de verse libre de sus pérfidos aguijones.
Zánganos, repito, porque si bien parecen abajas, no tienen travesura ni aguijones.
-¡No tienen aguijones!, respondió el de Alanza, ¿pues qué nombre daréis a esas flechas de tras pies con las que atraviesan la armadura de más fino temple, excepto las mallas de Vizcaya, y que dan siempre en el blanco, aunque no les presente más campo que la línea de un cabello?.
Este mal rapaz pensó e hizo una travesura de esta manera: tomó un manojo de zarzas, con las espinas muy agudas y venenosas, las cuales, atadas, colgó y puso debajo de mi cola para atormentarme, de manera que, como yo comenzase a andar, conmovidas e incitadas me llegaban con sus púas y mortales aguijones.
Abrían estos el paso algo desbandados y atónitos de tamaño esfuerzo y furor, pero cuando revolvían aquellos los caballos para ganar otra vez la posición primera, arrojábanse a su encuentro a manera de abejas provistas de alas para huir, y armadas de aguijones para vengarse.
Y si en nube de muerte le ha envuelto y empapado sus costados de inevitable ardid del traidor centauro, si se le ha inyectado el veneno, veneno que engendró la muerte, y crió centelleante dragón, ¿cómo va a lograr ver un día más que el presente, estando aprisionado por el espantable monstruo de la hidra, y si le desgarran ardiendo en sus carnes los aguijones de fuego candentes, preparados por los dolos de Neso el de la negra crin?.
Si ahí te acribillan las moscas, aguántalas con paciencia, y acuérdate de los que aquí sufrimos las picadas de los tontos que en este nefando Madrid con el calor se multiplican y aguzan sus penetrantes aguijones.
Los hombres, a falta de árboles, se ahorcaban de las astas de los bueyes, y otros, poniendo atado el cuello a las patas de éstos, después los picaban con aguijones para que, echando a andar, los arrastrasen y pisasen.
Trasluciéndose a Darío que aquel esclavo tergiversaba, hablando sólo a medias palabras, mandó al punto traer allí los azotes y aguijones.
A tres tales aguijones no terná cera en el oydo.
Con todo, si destos aguijones me da, traérgela he hasta la cama.
- ¿Cómo templará el destemplado? ¿Cómo sentirá el armonía aquel, que consigo está tan discorde? ¿Aquel en quien la voluntad a la razón no obedece? ¿Quien tiene dentro del pecho aguijones, paz, guerra, tregua, amor, enemistad, injurias, pecados, sospechas, todo a vna causa? Pero tañe e canta la más triste canción, que sepas.
¡Dulce vejez sin dolores y sin enfermedades, premio de la vida austera, tú que marchitas los sentimientos y despojas de aguijones el corazón del hombre ¿por qué no dejas siquiera los oídos abiertos para escuchar la lluvia que dice tantas dulzuras al desfalleciente y al moribundo?.
las fiestas, a que él haría que don Víctor llevase a su mujer, serían aguijones del deseo.
Aquellos nobles sentimientos fueron como abejas, que empezaron por clavar sus punzantes aguijones en el pecho de La Caramba, y después labraron en su centro panal suave de místicas flores.
En esto, las abejas, volviendo de libar y encontrándole allí, le picaron con sus aguijones y le maltrataron horriblemente.

© Todos los derechos reservados Buscapalabra.com

Ariiba