Ejemplos con vegetaciones

Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.

Las adenoides, amígdalas faríngeas o vegetaciones son dos masas de tejido linfoide situado cerca del orificio interno de las fosas nasales, en el techo de la nasofaringe, justo donde la nariz se une con la boca y forman parte de las amígdalas.
Laguna del Dial:Lugar ubicado en la cordillera, a continuación del camino de La Balsa, con camino de piedras, se llega en todo terreno hasta el sector del Matadero, desde ahí el camino es transitado en caballos, con caminos angostos, muy lindo en vegetaciones silvestre y faunas.
Las vegetaciones clásicas de la endocarditis de Libman y Sacks se forman por hileras de fibrina, neutrófilos e histiocitos.
Las lesiones valvulares tienden a ser vegetaciones granulomatosas y pueden ubicarse en cualquier porción del endocardio.
Está ubicado en una zona geográfica límite entre Costa y Sierra, transitoria entre climas, vegetaciones y culturas distintas, al atardedecer se ve cubierta en neblina todos los días, los precipicios son violentos.
Podía caminarse saltando de peñasco en peñasco, entre cabinas y otras vegetaciones silvestres, por una parte de la orilla del Vedrá, pero más adentro la roca se elevaba recta, lisa, inabordable, en pulidas paredes grises cortadas a pico.
Los fondos de arena reflejábanse como manchas lácteas, los peñones submarinos y sus obscuras vegetaciones parecían temblar con un rebullicio de vida misteriosa.
Perdida la fe en su importancia humana, considerábase igual a uno de estos monstruos pequeños que se agitaban en las vegetaciones del abismo submarino.
En los freos amontonábanse las olas con remolinos furiosos, pero bastaba un golpe de barra, una desviación de la proa, para quedar al abrigo de una isla, balanceándose la barca en aguas tranquilas, paradisíacas, límpidas, con un fondo visible de extrañas vegetaciones, en el que bullían los peces entre chisporroteos de plata y relámpagos de carmín.
De pronto incorporábase con nervioso impulso, y dando un salto desaparecía en la obscuridad, entre sonoro rumor de vegetaciones rotas.
La muralla natural se inclinaba años y años sobre las olas que batían incesantemente su base, hasta que, perdido el centro de gravedad, una noche de tormenta derrumbábase como la cortina de una ciudadela sitiada, deshaciéndose en bloques, poblando el mar de nuevos escollos, prontamente cubiertos de viscosas vegetaciones, en cuyos enmarañamientos hervían las espumas y chisporroteaban las escamas de los peces.
En el fondo de esta masa verdosa, iluminada con transparencias de ópalo por el sol poniente, veía agarradas a las peñas extrañas vegetaciones, bosques minúsculos, en cuyas frondas pegajosas movíanse bestias de formas fantásticas, rampantes y veloces o torpes y sedentarias, con duras corazas grises y rojizas, erizadas de defensas, armadas de tenazas, de lanzas y de cuernos, dándose caza entre ellas y persiguiendo a seres menos fuertes que pasaban como exhalaciones, haciendo brillar en la rapidez de la fuga su transparencia de cristal.
Junto a las orillas la zona llamada litoral, donde desembocan los ríos, se amontonan las substancias nutridoras al impulso de mareas y corrientes y crecen las vegetaciones subacuáticas.
El marino había visto estas vegetaciones pétreas, como bosques sumergidos, en el fondo del mar Rojo y en los mares del Sur.
Y ellos, desconociendo sus propios males, hablaban con horror de las dolencias que asaltaban a los hombres en la penumbra de la selva al remover el humus secular y las vegetaciones dormidas: grandes abscesos de la piel que acababan por rebullir lo mismo que un hormiguero, avivándose la carne en gusanos, emponzoñamientos de la sangre que mataban en breve tiempo a un hercúleo jayán, rápidas consunciones, devoradoras de grasas y de músculos, que sólo respetaban el esqueleto, dejándolo flotante dentro de la piel, cual si esta fuese un traje demasiado grande.
La quinta merienda y descanso fue en un lugar anchísimo en el que se podían apreciar vegetaciones más lozanas y espesas.
El continuo roce con Gabriel hacía germinar en sus cerebros, petrificados por el ambiente tradicional, un musgo de ideas semejante a las microscópicas vegetaciones con que las lluvias del invierno cubrían los contrafuertes berroqueños del templo.
Los mármoles parecían encerrar en su seno transparente hojas de vegetaciones inverosímiles, los muebles, por sus formas, incitaban a la voluptuosidad o al reposo, los tapices caían discretamente ante las puertas, los rasos y los flecos guardaban en la urdimbre de sus tramas los colores del iris, había canastillas de orquídeas australianas mezcladas con flores de cristal que despedían rayos luminosos, libros cubiertos de oro, que atesoraban en sus páginas el oro aún más puro del pensamiento humano, y todo ello en desorden bellísimo se reflejaba en espejos que, como poseídos de codicia, multiplicaban hasta lo infinito las riquezas.
El suicidio de ahora, múltiple y fugitivo como la democracia misma, parece una de esas vegetaciones malignas que revelan en los cuerpos degenerados la próxima corrupción de los tejidos.
Cachos de montaña, caídos contra el terruño, vegetaciones que arrastrara el alud, brechas que abrieron los torrentes, boquetes sombríos que torneó el fuego subterráneo, cambiaban por completo el dibujo de las llanuras.
Macizos de tierra, extendidos por la planicie y cubiertos de vegetaciones salvajes, hablan de algo que era jardín.
Ella, en sueños, naturalmente, llegábase hasta el caballero de los ojos claros y los borgoñones bigotes, alzábale de tierra, alegraba su dolor con una sonrisa y, juntos los dos, encaminábanse hacia jardín de vegetaciones exóticas, para ocupar un trono endoselado por cortinas de tenue azul, las cuales iban sobre ellos espesándose, hasta ocultarlos, hasta hacerlos desaparecer bajo una nube que subía y subía en dirección del infinito, acompañada por el canto de los pájaros y los besos del aire.
Desde la cima hasta la mitad de los montes se desparramaban vegetaciones lujuriosas.
vegetaciones acuáticas, pero don Rafo me detuvo, rápido como el grito de.
El mar era extendida tela de un azul puro, refulgente, allá a lo lejos, los montes adquirían tonos de amatista, y los escollos, que otros días tenían un negror sombrío y tétrico, eran, bajo las últimas caricias del sol, de un rojo de caoba, veteado del verde de las vegetaciones marinas.
Montecristo se sonrió al ver este silencio que denunciaba una humildad inusitada, mostrando a la baronesa dos inmensos jarrones de porcelana de China, sobre los cuales serpenteaban vegetaciones marinas de un cuerpo y de un trabajo tales, que sólo la naturaleza puede poseer estas riquezas.
Me asomé a una ventana abierta en la pared del Este junto a una alacena, y vi lo que ya me había imaginado: el peñascal negro, jaspeado de grietas con vegetaciones silvestres y separado de la casa por un callejón pendiente, de lastras resbaladizas.
Sobre estas vegetaciones se asientan islas que surgen del mar.
Hay en los abismos del Océano inmensas vegetaciones de minúsculas madréporas, que labran en silencio la red enorme de sus viviendas.

© Todos los derechos reservados Buscapalabra.com

Ariiba