Ejemplos con tapujos

Por último se abordaban sin tapujos temas como la sexualidad juvenil.

Sin embargo, permanece en el país, donde empieza a desempeñarse como comunicadora, revolucionando el tema de la sexualidad a través de su participación en varios programas de televisión y de diversos espacios propios en la radio mexicana, caracterizándose por su lenguaje directo y sin tapujos para abordar dichos temas, sin pelos en la lengua era como ella misma describía su estilo.

El realizador supo jugar con esos elementos para ofrecer un producto que cobinaba los esquemas clásicos de un programa de variedades, ecplotando sin tapujos, el erotismo de las dos presentadoras que sucesivamente estuvieron al frente del programa.

Aquí los que comentan los temas de actualidad son niños que hablan sin tapujos sobre como ven los temas más importantes de la semana.

Hot Line con Gaysell: espacio donde se trata explícitamente de sexo, sin tapujos.

Los dos chicos viven su amor sin tapujos, hasta que una noche en una salida, un enigmático joven conquista a Jonás.

Algunos científicos llegaron a decir sin tapujos que tal evento sería el detonante de la nueva glaciación que ha de venir dado que nos encontramos en una situación relativamente cercana en términos geológicos al próximo mínimo glacial.

Blanche habla sin tapujos de sus deseos y de su vida sexual, algunos estudiosos consideran que este personaje también tiene su inspiración en una persona de la vida real: el mismo Tennessee.

La pantalla mostró una ceremonia de intercambio de anillos entre Pedro y Sean, mostrándose sin tapujos una relación gay abierta, afectiva y plagada de amor, lo que asimismo marcó otro hito en la TV estadounidense.

El pavo sería el símbolo de la brutalidad de la verdad que se revela violentamente, una verdad sin tapujos.

De conformidad con la propia estética proclamada en el libro antedicho, Hogarth presente representarse sin aparato exterior ni idealizaciones, reflejando la verdad sin tapujos.

¿Jiménez? No sé, chica Ése siempre anda en misterios y tapujos.

El no gustaba de tapujos y traiciones: su procedimiento era el mejor.

Pues que todo se había descubierto, nada de tapujos, y pelillos a la mar.

Era la encarnación del ideal progresista, y en sus dos tiendas se refugiaron una y mil veces los cabildeos electorales y aun los tapujos revolucionarios.

Con él de nada servían los tapujos.

No iba con tapujos y miedos como muchos sacerdotes que sólo hablaban de piedad y perdón para los enemigos, y de la dulzura de Jesús.

Una noche conocí a Wagner, pero sin tapujos, como quien dice en su propia salsa.

Cuando el otro día a casa con la tarjeta de usted, me dije: Suceda lo que quiera, no ando con tapujos , y se la di como si fuera cosa corriente.

Yo soy indulgente, soy hombre, en una palabra, y sé que decir es lo mismo que decir Pues vienes y me lo cuentas a mí, en mis barbas, nada de tapujos ¿Creerás que voy a venir con un revólver para pegarte un tirito y pegarme yo otro? ¡Valiente asno sería si lo hiciera! No.

Más derecho era referir a su tía lo que le pasaba, que no andar con tapujos.

¡Ay, Dios mío, qué gracioso! Es para comérselo Yo, te digo la verdad, le traería a casa si no fuera porque a Baldomero y a Juan no les gustan estos tapujos ¡Ay!, de veras te lo digo.

Pero aquí tienes el resultado de tus tapujos ¡Ah, las mujeres!, todas ellas tienen una novela en la cabeza, y cuando lo que imaginan no aparece en la vida, que es lo más común, sacan su composicioncita.

¿Qué significaban estos tapujos? ¡Introducir un Belén cual si fuera matute! Y como expertísimo contrabandista, hizo Plácido su alijo con admirable limpieza.

Viviendo en la casa no necesitaba emplear tales tapujos.

Según lo convenido, el Pinzón debía salir de la casa a la hora de costumbre y volver ocultamente a las nueve, y entrar en su cuarto, del cual y de la casa saldría también clandestinamente más tarde, para volver sin tapujos a la hora avanzada de costumbre.

¿A qué andar con tapujos? ¿No es verdad, señor de Congosto, que hago bien en poner las cosas en su verdadero lugar? Si nuestra amiga siente una amorosa inclinación hacia alguien, ¿por qué ocultarlo? ¿Es acaso algún pecado? ¿Es acaso un crimen que dos personas se amen? Yo tengo derecho a permitirme estas libertades por la amistad que les tengo a los dos, y porque ha tiempo que les vengo aconsejando se decidan a dejar a un lado los misterios, secreticos y trampantojos que a nada conducen, sí señor, y que por lo general suelen redundar en desdoro de la persona.

-¡Calla, deslenguado procaz! ¡Qué has dicho! La señora condesa, prima de mi señora, había de tener semejantes tapujos.

Apuradamente no tengo por qué andar con tapujos a estas horas.

tapujos.