Ejemplos con porches

Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.

A mayores escalas, los porches pueden rodear edificaciones completas o plazas o patios interiores rodeando el perímetro de los edificios.
Se pueden encontrar en los porches, escaleras delanteras, patios, orangeries, en localizaciones urbanas, y en tejados.
Tiene la portada en arco y dos porches en los lados.
Cuenta con una curiosa sacristía apechinada, y porches feriales.
Es una plaza a dos niveles, con muchos recovecos pequeños, cerrada por tres de sus cuatro lados con modernos porches y dividida en dos por el Monumento a la Fundación de Castellón.
Un Porche es aquel espacio arquitectónico inmediatamente anterior al recibidor, los porches son comúnmente utilizados en las casas habitación, sin embargo es también común observarlos en los edificios gubernamentales.
Son antesalas de las entradas a los edificios y aunque habitualmente el termino logia es utilizado en espacios pequeños a modo de galería, los porches han sustituido casi por completo a la palabra logia.
La diferencia entre los pórticos y los porches reside en que los últimos son en general más chicos y pueden tener una extensión variable además de que en ocasiones su ubicación varía de las fachas y es dispuesta además en jardines o patios.
Los porches son espacios techados, en los que circula libremente el aire y están cercados en su parte posterior por la edificación a la cual son correspondientes, aunque esta separación puede ser incluso un ventanal.
Los porches son en realidad el remanente del templo in antis griego, al ser dos o mas columnas las que separaban la pronaos o vestíbulo del espacio exterior, ahora los porches pueden ser observados en los estilos neoclásico, colonial y campestre con mucha frecuencia.
La arquitectura única del edificio incluye muebles de época y unos amplios porches que permiten unas vistas magníficas.
Disponen de un gran corral para los ovinos, establos, porches abiertos y cerrados situados alrededor de la era, normalmente enlosada.
Las calles mas comerciales de Barbastro eran Mayor, Monzón, Mercado y Rioancho, destacando las dos últimas que con sus porches y enlosados facilitaban al público sus compras.
Su deber era abandonarlo todo, vivir de limosna, sufrir penalidades, dormir bajo los porches, alimentarse de hierbas, con tal de seguir la voz del Inteleto y dar con aquellas cosas nunca oídas que el geniecillo interior le prometía.
A los otros costados de la plaza se muestran los bajos porches, con columnas de piedra unas, de madera otras, gastadas, carcomidas, con capiteles dóricos, con capiteles jónicos, combadas las zapatas.
El río corre rumoroso, de escalón en escalón, entre dos ringlas de viejas casas, las calles son estrechas, sórdidas, un olor de humedad y cocina se exhala de los porches oscuros, tocan las campanas a las novenas, entran y salen en las iglesias mujeres con mantillas negras, hombres que remueven en el bolsillo los rosarios.
Cuando ésta me dijo que vio a Olegaria en los porches de la plaza, creí morirme.
Después, tirando a la izquierda, por una calle con porches, vuelve a entrar en el pueblo, y derecho, derecho, sale a la parroquia, y a casa.
Beltrán en una casona llamada que hace esquina con el Ayuntamiento, gótica, de ojivales porches al exterior, interiormente muy capaz, con ventanas pequeñas, las puertas no muy holgadas.
Pero cuando lo vea otra vez, tengo la certeza de que me abrazará agradecido y me llamará ¡tiíto!, como cuando era pequeño y pasaba los domingos jugando en los porches de mi casa.
En los porches lo encontrarás, Juanito.
Don Juan estaba arriba, en los porches, dando de comer a los palomos y a las gallinas.
Él era quien iba al despacho de don Manuel a escoger pañuelos y piezas de seda, raso o terciopelo en aquellos armarios de roble con cerradura complicada, que databan del siglo anterior, y él también quien subía a los porches, donde con un tric-trac ensordecedor movíanse los telares y volaban las lanzaderas, haciendo surgir los ricos tejidos entre polvo y telarañas.
Ni en los porches ni en los portales valía guarecerse, porque el viento y el agua los invadían, cada mochuelo se iba a su olivo, se cerraban puertas con estrépito, poco a poco se apagaban los ruidos de la ciudad industriosa, y los elementos desencadenados campaban por sus respetos, como ejército que hubiera tomado la plaza por asalto.
Por entre los porches de la calle de Rivoli oyó Teresa la siniestra noticia, sin perder la serenidad, y confortó el ánimo turbado de su salvaje con estas apacibles razones: «Almorzaremos tranquilamente, y luego, en casa, vendrá la deliberación y oirás mi parecer.
Cuando ésta me dijo que vio a Olegaria en los porches de la plaza, creí morirme.
Después, tirando a la izquierda, por una calle con porches, vuelve a entrar en el pueblo, y derecho, derecho, sale a la parroquia, y a casa.
Sobre esto me dijo algo la pobre Mita cuando íbamos hacia los porches, añadiendo que si Dios se volviese atrás de lo dicho y dejase morir a Ley, ella se iría para el otro mundo sin perder momento.
Admirable punto de defensa era para el gladiador desnudo el arranque estrecho de la calle de Toledo, entre gruesos porches que le servían de amparo.

© Todos los derechos reservados Buscapalabra.com

Ariiba