Ejemplos con magro

Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.

Enseña historia del arte en un colegio de monjas y se convierte en profesor asistente de la escuela con un magro sueldo, además de mantener sus actividades como cartelista de cine, publicista, decorador de las carrozas de Carnaval y de fastos públicos religiosos, mientras devora toda la información que cae bajo sus sentidos sobre esoterismo, parapsicología y ciencias ocultas.
En terrenos de regadío, tanto en la zona del río Magro como en el llano de la Masía de la Calabarra se cultivan naranjos, frutales, maíz, hortalizas y otros productos.
Milanesa de un corte magro, al horno, o frito con muy poco aceite y que sea preferentemente de oliva, o de canola.
Surcada por el río Magro que nace en Utiel de la unión del río Madre o de Caudete y la rambla de La Torre.
Llegó a México con su esposa Petra Magro, originaria de Argamasilla, España y sus hijos Joaquín y Roberto.
Debido a la necesidad, Bevilacqua se preparó las oposiciones a guardia civil no por vocación, sino como una salidad para conseguir un sueldo magro, pero digno y las sacó tras prepararse especialmente las pruebas físicas.
Sólo cuando estuvo con su magro equipaje sobre la cubierta de un vapor próximo a zarpar tuvo interés en conocer su rumbo: Para el río de la Plata Y acogió estas palabras con un gesto de fatalista.
La Vida es un magro puchero, la Muerte, una carantoña ensabanada que enseña los dientes, el Infierno, un calderón de aceite albando donde los pecadores se achicharran como boquerones, el Cielo, una kermés sin obscenidades, a donde, con permiso del párroco, pueden asistir las Hijas de María.
-¿A seis riales? ¡Pos ni que los hubiera usté alimentao con somatose! Pos si a siete se vende el magro fuera de puertas, y a seis y medio el tocino entreverao.
El cazador no sabía ya qué pedazo tajar en el magro cuerpo, un respeto inexplicable le impedía llegar con su cuchillo al cuello y arrojar en la balanza la cabeza, siempre iluminada por sonrisa de extática beatitud.
Había, pues, mucha boca abierta que pedía pan, mucho chico sucio que se revolcaba en la basura, mucho cuerpo magro que temblaba de frío, era preciso ir a llevar que comer, a buscar harapos, y, para eso, quedar sin alientos y trabajar como un buey.
E contésçese en esto que, si le catan deyuso de la lengua, fallarle an granos como granos de trigo e duros como ternilla, e en la carne, cuando es muerto, aparesçen granos como de lantejas grandulosas entre lo grueso e lo magro.
Una nota asustada, suelta mi pecho magro.
Pero a Rodrigo así le gusta, porque está enamorado de lo magro.
Magro es lo que toca en el violín, magro todo lo que piensa.

© Todos los derechos reservados Buscapalabra.com

Ariiba