Ejemplos con húngara
Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.
Desde la capital húngara se gestionan las empresas de la propia Hungría y de la República Checa, Eslovaquia, Polonia y Rumanía.
Paulina de Metternich nació en el seno de una familia de la nobleza húngara.
A pesar de que la población húngara ha sido suplantada por nuevos inmigrantes, se sigue realizando un Festival Húngaro en la Somerset Street el primer sábado de junio de cada año.
En la actualidad, la mayoría de la comunidad húngara continúa creciendo.
Hubo un punto en él que un cuarto de la población húngara de Nueva Jersey residía en la ciudad.
Existe una variante en la cocina húngara llamada vaniliás kifli.
Algunos roxolanos buscaron refugio en la Mesia romana, otros se retiraron más hacia el Oeste y se unieron a los yázigas en la llanura húngara.
La historiografía húngara los considera habitualmente una falsificación mientras que la croata los toma como auténticos.
Llegó a ser muy popular entre los magiares y fue el fundador de la rama húngara de los Habsburgo.
Por Chignahuapan, el conde Tancred De la Salla entró con un agrupamiento de caballería húngara.
Su música presenta una voluntad de transmisión de la tradición y a la vez también presenta un fuerte componente de patriotismo y de aspiración de la liberación nacional de Eslovaquia de la dominación húngara.
Czibor fue un futbolista que jugó en varios clubes húngaros, incluidos Ferencváros TC y Honvéd, y la selección húngara, antes de incorporarse a FC Barcelona.
Su clima representa la transición entre la Gran Llanura Húngara y el Transdanubio.
Al contrario que sus predecesores, quienes habían quedado cerca de la Corona Húngara, Bogdan fortaleció la posición de Moldavia y aseguró su independencia a una década después de subir al trono.
Miguel, aliado con Basta, derrotó a la nobleza húngara en Gur sl u.
Miguel pidió nuevamente ayuda a Rodolfo II, quien aceptó ayudarle porque Basta había perdido el control sobre Transilvania, que estaba en los manos de la nobleza húngara, liderada por Segismundo Báthory.
Los estados vecinos se alarmaron con el cambio en la balanza de poderes, pero también la nobleza húngara de Transilvania, que se rebelió en contra de Miguel.
La economía húngara de la posguerra tuvo que enfrentar múltiples desafíos.
En Egipto había tenido que huir de las caricias decadentes de una condesa húngara, marchita flor de elegancia, de ojos hundidos y violento perfume, que revelaba bajo tersos y juveniles esmaltes la podredumbre de su carne.
Verdaderamente, era para ella una desgracia llamarse Albornoz, porque de ser su nombre menos ilustre, hubiera corrido a la capital del antiguo reino de los Esteban y Vladimiros a disputar el premio de la hermosura a Cornelia Szekely, la húngara laureada.
