Ejemplos con guareciéndose

Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.

Pasó varios años viviendo como vagabundo en las calles de París, y guareciéndose en los cines Grand Boulevards.
En efecto, mientras que la escena principal representa a varios caminantes guareciéndose de una ventisca en un paisaje nevado, de vuelta de una matanza, uno de los lienzos laterales muestra a un albañil que es transportado por sus compañeros tras caer del andamio, formando pareja con el que representa a la mujer que acude con los niños a la fuente.
El metraje muestra a al-Durrah y su padre guareciéndose del fuego cruzado detrás de un cilindro de hormigón cuando aparentemente es alcanzado por los disparos.
Era grato escuchar el de los ateridos gorriones, guareciéndose por centenares en una washingtonia que había cerca de casa, como en una gran pajarera: era grato ir a dar de comer a los animalitos exóticos que don Rosendo tenía en su finca, salvando en almadreñas la distancia que separaba sus cobertizos de la casa: era grato también quedarse adormecido en una butaca al pie de la chimenea con el cigarro en la boca y la botellita de ron delante, mientras Cecilia leía un cuento interesante o algunos versos sonoros y armoniosos.
A las doce o doce y media salían todos en pelotón, remangándose los pantalones y las faldas respectivamente, y guareciéndose debajo de los paraguas, charlando en voz alta al través de las calles solitarias y húmedas.
Y tras un corto rato de espera, visto que el temporal amainaba por momentos, se pusieron en marcha, guareciéndose dos bajo la negra bóveda del paraguas, y el tercero arrimadito a la pared.
Varios de mis ayudantes se habían retirado guareciéndose bajo la sombra de un algarrobo.
Pía sobresaltada la miruella, guareciéndose en el desnudo bardal, o cita cariñosa a su pareja desde la copa de un manzano, óyese, triste y monótono, de vez en cuando, el ''¡tuba! ¡tuba!'' del labrador que llama su ganado, tal cual sonido de almadreñas sobre los morrillos de una calleja.
Y tras un corto rato de espera, visto que el temporal amainaba por momentos, se pusieron en marcha, guareciéndose dos bajo la negra bóveda del paraguas, y el tercero arrimadito a la pared.
Este personaje, hidalgo harto desgraciado en sus ambiciosas empresas, y que cediendo al carácter clásico de aquella nobleza turbulenta y rebelde, probara suerte mas de una vez en las rencillas y colisiones que se cruzaran entre sus altivos magnates, tenaces en su sistema y orgullosos hasta el punto de no tornar en cuenta los accidentes prósperos o adversos de aquella lucha perdurable por abandonar su empeño, que por otra parte seguían tenaces y con una constancia ciegamente sistemática: este hombre, repetimos, si bien de alta alcurnia, arruinado por su larga carrera de prodigalidades y locas tentativas, sin influencia moral, reprobado, aborrecido en el concepto público y sobre cuya cabeza pesaran severas responsabilidades, casi viejo ya, achacoso y débil, hubo de ceder forzosamente al destino, y no contándose, al parecer, seguro con sus propias fuerzas ni con las de sus deudos y aliados, pobres señores como él, también arruinados por el descrédito y el desorden, aislado, solo en aquel su castillejo gótico, solía siempre retirarse con la sonrisa en sus labios y el corazón rebosando rencor y odio, guareciéndose al abrigo de su pupila y buscando un amparo en su propio castillo de Monforte.
Drummle le seguía guareciéndose en la sombra de las casas, como si también en aquel momento lo siguiese.
Bromberg, guareciéndose en el pórtico, miró la jadeante oscuridad estremecida por la lluvia, luego contestó:.
guareciéndose en los rebalses, remontando tan sólo en noches oscuras, y en.
guareciéndose en chozas mínimas, y volvían al tambo con la goma ya.

© Todos los derechos reservados Buscapalabra.com

Ariiba