Ejemplos con escobillón

Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.

Un haz de cañas se elevaba esbelto, y a su lado, las agudas poas sacudían su escobillón de terciopelo castaño.
En aquel momento me sentí cogido por el brazo, y volviéndome encaré con mi suegro, el señor don Feliciano de Emparán, en quien reconocí la imagen del terror: su boca era como la de una máscara griega, de la guardarropía de Melpómene, y sus cabellos, si no los empobreciera la calvicie, habrían estado en punta como las crines de un escobillón.
En el hombre vi, como rasgos culminantes del tipo, un bigote negro cerdoso cortado en forma de cepillo, cabellera abundante cortada como escobillón, nariz pequeña y atomatada, bastón de cachiporra, gabán claro de largo uso, y sombrero, que en toda la visita permaneció en la mano de su dueño.
En la comitiva de estos viene un mulato, con el pelo como un escobillón: le llaman Alejandro Dumas.
y vuelta a revolverse y a suspirar fuerte, pasándose a cada instante la mano por la cabeza, a contrapelo, cual si quisiera hacer de esta un perfecto escobillón.
Era este de color moreno, facciones bastas y rudas, del tipo castellano, común en campo más que en ciudades, bigote negro con mosca, cabello encrespado, que parecía un escobillón, complexión dura, el habla ruda y clásica, de perfectísima construcción castiza.
Al poco rato entró en el despacho un hombre muy flaco, de cara enfermiza y toda llena de lóbulos y carúnculas, los pelos bermejos y muy tiesos, como crines de escobillón, la ropa prehistórica y muy raída, corbata roja y deshilachada, las botas muertas de risa.
Gustábale calzarse en el pie derecho el grueso escobillón, y arrastrando el paño con el izquierdo, andar de un lado para otro en la vasta pieza, con paso de baile o de patinación, puesta la mano en la cintura y ejercitando en grata gimnasia todos los músculos hasta sudar copiosamente, ponerse la cara como un pavo y sentir unos dulcísimos retozos de alegría por todo el cuerpo.
Tenía la cara granulosa y el pescuezo como el de un pavo, con una nuez muy grande, el pelo escobillón, y se expresaba en términos muy distintos del gárrulo lenguaje de su amigo: Al Rey Luis XVIdijo, y a la Reina Doña María Antonieta les cortaron la cabeza, naturalmente, porque no querían darle libertad al pueblo.
La boina blanca caída de un lado parecía impedir con su peso que el cabello, no menos áspero que la barba, tomase la dirección del techo, como un escobillón que se cree ciprés.
En aquel momento me sentí cogido por el brazo, y volviéndome encaré con mi suegro, el señor don Feliciano de Emparán, en quien reconocí la imagen del terror: su boca era como la de una máscara griega, de la guardarropía de Melpómene, y sus cabellos, si no los empobreciera la calvicie, habrían estado en punta como las crines de un escobillón.
En el hombre vi, como rasgos culminantes del tipo, un bigote negro cerdoso cortado en forma de cepillo, cabellera abundante cortada como escobillón, nariz pequeña y atomatada, bastón de cachiporra, gabán claro de largo uso, y sombrero, que en toda la visita permaneció en la mano de su dueño.
La cabeza de aquel hombre era como un escobillón, su rostro una máscara griega contraídas por la mueca del espanto.

© Todos los derechos reservados Buscapalabra.com

Ariiba