Ejemplos con distante

Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.

Dewing escogía preferentemente la figura femenina como vehículo de expresión artística, leyendo, tocando música, escribiendo, sus figuras muestran una vida interior insulsa, etérea, distante hacia el espectador.
Esto, combinado con las dificultades para suministrar y proteger una colonia tan distante, causó un interés que mengua.
Fue conducido al Central Receiving Hospital, distante a una milla, llegando en estado pre-agónico.
Es una composición simétrica, equilibrada, con una modelo algo distante, ejemplo de la frialdad objetiva de sus reatratos.
La figura fría y distante de Romina, de a poco va cambiando, dando lugar a la verdadera mujer que siempre fue y que debió endurecerse por las situaciones que tuvo que pasar.
Esta fuerza de tarea fungía de escolta distante de seis transportes que llevaban refuerzo para la Marina en Guadalcanal.
La mamá de Hanna, una diseñadora de modas, deja a un lado sus sueños artísticos y da todo su tiempo para apoyar al papá de Hanna, un escritor que no es publicado pero que ella cree que es un genio, él, distante y errático, obtiene trabajo para un períodico, pero pronto renuncia y pasa todo el día jugando ajedrez en un café mientras su esposa piensa que está trabajando.
Pero de igual modo lo utilizamos al hablar de algo que se halla distante en el espacio.
Según esta teoría, por tanto, Homero realmente existe ahora, si bien debemos emplear un lenguaje específico al hablar de alguien que existe en un momento distante del actual.
Al ponerse el sol sintieron el ambiente muy cálido, cosa extraordinaria en estas costas: dieron fondo con un anclote al sud-oeste, un cuarto al sur de un cerro, el mas alto de esta costa, distante seis leguas.
Volvieron los dos soldados que se habian quedado en tierra la noche antecedente, y dijeron haber hallado agua dulce en una laguna, distante cuatro leguas de la bahia, y guanacos y avestruces, pero que no se veian árboles en cuanto alcanzaba la vista.
Una mañana montados en sendos caballos emprendieron secretamente la marcha hacia la ría de Orleo, distante cuatro leguas de Sarrió.
De la corte, de sus saraos y regocijos, había permanecido tan distante como en Sarrió.
El autor, que tan sin escrúpulos de ningún género ataca de frente al vicio y a la insolencia, se reserva siempre su juicio sobre individuos determinados, y se halla muy distante de pretender herir personalidad ninguna, por despreciable que le parezca.
Andrés tomaba asiento lejos de nosotros, en la otra cabecera, siempre distante de sus amos, sin igualarse a ellos, sin confundirse con las personas que creía superiores a él.
¡Astorga! ¿Qué nos importaba a nosotros eclipsar a gentes de un país tan distante del nuestro? Pero a D.
Desgarbada, verde, larga de piernas y brazos, con el cuello de agarrotada, las manos huesosas, la mirada repugnante, aunque impregnada de cierta melancolía, la boca inútil para la risa,—meteoro fisonómico que en ella es una atroz descomposición,—sin armonía en las facciones, con la boca algo distante de la nariz, con la nariz demasiado cerca o demasiado lejos de los ojos, con los dientes dislocados, con las orejas un poco grandes.
Entonces exclamé, como si pudiera ser oido por la distante muchedumbre:.
Mientras tanto, la Europa continuaba su marcha, y España, que había estado a su cabeza, fué poco a poco quedándose más distante en el camino del progreso.
No, si no hay más Yo retiré mi mano, y me fui sin decirle nada No tuve alma para seguir adelante sin mirar para atrás, y miré y le vi Me seguía, distante.
Vivían entonces los Pardos en su casa solariega, no muy distante de la de Ulloa: al enviudar la madre de don Pedro, el mayorazgo de la Lage iba a casarse en Santiago con una señorita de distinción, trasladando sus reales al pueblo, y don Gabriel, el segundón, se vino a los Pazos de Ulloa, para acompañar a su hermana, según decía, y servirle de amparo, en realidad, afirmaban los maldicientes, para disfrutar a su talante las rentas del cuñado difunto.
El pinar no estaba muy distante, y por el centro de su sombría masa serpeaba una trocha angostísima, en la cual se colaron montura y jinete.
¡Todo era igual y estaba en el mismo sitio que siempre, recordando el dia tristísimo, y mucho más distante, en que entró allí por primera vez, cogido de la mano del caritativo sacerdote!.
Al ponerse el sol paré en frente del nuevo pueblo de , que se principiaba a edificar: dejé mi canoa distante como media legua del pueblo, y pasé a ver al Señor Arias.
a N, en el que se incorpora dicho Rio de Ledesma: siendo su nacimiento de una sierra así llamada, a la parte del poniente, y a sus márgenes a la parte del S, distante dos leguas, se halla una reduccion llamada , a cargo de los religiosos de mi orden, y un presidio llamado : y a la parte del N, en distancia de una legua, se halla el Fuerte de Nuestra Señora del Rosario de Ledesma, construidos uno y otro en la jurisdiccion de Jujuy.
Al E del campamento corre el Salado distante una milla, y ya tiene alguna barranca, aunque dicen que se seca.
Del referido Cerrito pasamos a la laguna de Carpincho, distante una milla: su agua, aunque no es salobre, tiene el defecto de ser legiosa, pero en su orilla hay filtraciones de buena agua: por cuya razon, considerando que la distancia a Gaboto es proporcionada para hacer un fuerte, se ha señalado con el nombre de.
Salida de dicho Fortin: a la una y media legua se cortó el rio Areco, despreciable por su poca agua, y en verano se seca: nace de la laguna llamada del , distante una y media leguas del paso, y desagua el dicho arroyo o rio en el Paraná.
Juan a Lorenzo que se desviase del camino, porque si acaso entre aquella gente viniese el duque, le queria hablar allí ántes que se encerrase en Ferrara que estaba poco distante.
Ya no hay ninguno que, saliendo deste bosque, entre en aquella montaña, y de allí pise una estéril y desierta playa del mar, las más veces proceloso y alterado, y, hallando en ella y en su orilla un pequeño batel sin remos, vela, mástil ni jarcia alguna, con intrépido corazón se arroje en él, entregándose a las implacables olas del mar profundo, que ya le suben al cielo y ya le bajan al abismo, y él, puesto el pecho a la incontrastable borrasca, cuando menos se cata, se halla tres mil y más leguas distante del lugar donde se embarcó, y, saltando en tierra remota y no conocida, le suceden cosas dignas de estar escritas, no en pergaminos, sino en bronces.

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