Ejemplos con deslumbró

Durante la estancia de Capello en la Roma, Cassano deslumbró con su mejor nivel de juego, pero ni siquiera el severo entrenador italiano estuvo fuera de discusiones con el delantero.

Ahí el muchachito deslumbró en tierras argentinas.

Alguien deslumbró mucho a aquella negrita niña del asilo.

Al regresar aprovechó para conocer Cuba, que lo deslumbró.

Por supuesto, el reclutador se deslumbró, y por lo tanto, se presume que él gana la Beca Robinson.

Artista y científico italiano que se deslumbró con las comunidades indígenas del Paraguay y las retrató con pericia documental y talento, es una de las historias más sorprendentes de la historia de la fotografía.

Conformó un equipo de juveniles que deslumbró en torneos de inferiores mucho antes de que pudiera debutar en reserva, algunos de sus compañeros con los que jugó en inferiores fueron jugadores que integrarían el plantel titular años más tarde, como Oscar Ustari, Carlos Matheu, Adrián Calello, Hernán Fredes y Sergio Agüero.

El Fino Cañete deslumbró a nivel local, con la querida albirroja y en el difícil fútbol argentino.

La mansión deslumbró a la sociedad de la época, por su lujo.

Este relámpago no fue el último que me deslumbró aquella tarde en la cálida atmósfera del Congreso.

Y su imagen resurgió vivísima, con una luz que lo deslumbró.

La oferta de aquel cuantioso donativo no deslumbró a la de Butrón, habíase turbado mucho mientras hablaba su amiga, y moviendo la cabeza vivamente dijo:.

Admirados desta primera vista el cadí y los demas bajáes, ántes que otra cosa dijesen ni preguntasen, mandaron al judío que hiciese que se quitase el antifaz la cristiana: hízolo así, y descubrió un rostro que así deslumbró los ojos y alegró los corazones de los circunstantes, como el sol que por entre cerradas nubes despues de mucha escuridad se ofrece a los ojos de los que le desean: tal era la belleza de la cautiva cristiana, y tal su brio y su gallardía, pero en quien con mas efecto hizo impresion la maravillosa luz que habia descubierto, fué en el lastimado Ricardo, como en aquel que mejor que otro la conocia, pues era su cruel y amada Leonisa, que tantas veces y con tantas lágrimas por él habia sido tenida y llorada por muerta.

Hízolo así, y descubrió un rostro que así deslumbró los ojos y alegró los corazones de los circunstantes, como el sol que, por entre cerradas nubes, después de mucha escuridad, se ofrece a los ojos de los que le desean: tal era la belleza de la cautiva cristiana, y tal su brío y su gallardía.

Pero a quien deslumbró este centro de los rayos de la prudencia, gran restaurador de la monarquía goda, fue, cuando más, a su heroica consorte, después a los tahures del palacio, sutiles a brujulear el nuevo rey, desvelados a sondarle el fondo, atentos a medirle el valor.

deslumbrarlas, y de tal modo las deslumbró, que cuando.

Toda la sangre se le agolpó al corazón, empañáronse sus ojos y una roja llamarada lo deslumbró.

Si desnuda le pareció a la lavanderilla un ángel o un genio por la hermosura, ya vestido la deslumbró con su majestad, y le pareció el emperador del mundo y el príncipe más adorable de la tierra.

Recordé esta frase del señorito, y al recordarla, me deslumbró más aún aquella luz diabólica que llegaba adentro, al fondo de mi ser de hombre apasionado, caprichoso, en la plenitud de la edad.

Pero, llegado a esas cimas vertiginosas de la vida, Belzu no se deslumbró.

Dos bayonetazos me echaron a tierra sin sentido, pero no antes de haber entrevisto bajo el fúnebre cendal de su negra cabellera el divino perfil de aquella que deslumbró mis ojos en el templo del Socorro.

-¡Ah! -exclamó el oficial- esta Aura gentil era la Estrella de Salta, esa bellísima Aurelia que nos deslumbró en el baile con que la generala festejó nuestro arribo trayendo la división de Tucumán.

Se durmió en el ataúd, lo despertó el sonido del precioso metal al caer en las losas del templo, le deslumbró el brillo, y no pudo contener el ademán ni la exclamación, que asustaron a los bandidos.

A los que nos dejamos seducir por la tersura y belleza del estilo, nos deslumbró el Sr.

La bandeja deslumbró a Paleólogo, que se guardó aquellas creyendo que eran un dineral.

Su frente, de proporciones exquisitas, me deslumbró cual si de ella irradiara una claridad que iluminaba el mundo.

Brummel rompía rara vez el silencio, era el magnetizador de un rebaño, la conversación de Barbey deslumbró a la sociedad más aguda de Europa.

Gavroche levantó los ojos asombrado de la magnitud de aquella moneda, la miró en la oscuridad y le deslumbró su blancura.

gran sagacidad, que con la misma verdad deslumbró la atención del vivaz Enrico Cuarto.

Teresa colocó en el altar aquel ramo de rosas coronadas de lagrimas, y de repente un resplandor divino deslumbró sus ojos e inundó de luz el templo: el sol, reflejando en las lágrimas que coronaban las rosas, había trocado cada lágrima en un diamante, rico de luz y hermosura.