Ejemplos con cumplo

En Asunción, Carvallo fue recibido con honores y realizó un breve discurso que decía Señor Presidente: en este momento cumplo el deber de transmitiros, el mando supremo de la república, al que habéis sido elevado por el voto unánime de la nación, a lo que Escurra contestó Pienso amoldar mis actos a la Constitución y a las leyes, siguiendo vuestro ejemplo.

Deplorando sencillamente tan infausto acontecimiento y acompañándola en su duelo, cumplo con el penoso y triste deber de enviarle las para usted inestimables prendas que se encontraron en su poder, y que son las que figuran en la lista adjunta.

Pero, señor capitán yo no merezco yo creo que cumplo esto es muy natural, yo no soy nada ¡qué he de ser yo! ¡Jesucristo! ¡Dios! ¡el pueblo!.

Yo cumplo, yo infrinjo conforme a supremos dictados de humanidad viviente y creadora, y al punto me sale la ley de indulto que acalla mi conciencia, reconciliándome con las soberanas leyes.

¡Ay, Gabriel! No creas que cumplo sin trabajo mis pesados deberes.

-Eso fue lo convenido y lo cumplo lealmente -prosiguió el siciliano-.

la promesa, y hoy con el mayor gusto la cumplo.

¡Dí lo que quieras! Yo cumplo con no ocultarte nada, nada de cuanto pienso y siento.

La viuda de Jáuregui no hacía gran sacrificio, y su determinación estaba calculada con habilidad, pues como una de las vecinas le dijera que Guillermina pensaba echar un guante al día siguiente para atender a las apremiantes necesidades de algunos inquilinos de la casa, doña Lupe pensó de esta suerte: Con quedarme a velar, cumplo, y eso del guante no va conmigo, porque en todo el día de mañana no aparezco por aquí, ni a media legua a la redonda.

Señora contestó el Comendador: si no creyese que cumplo un deber imperioso viniendo hasta aquí, no hubiera venido.

Esto ya no es limosna, es un deber mío, un deber de familia que cumplo como puedo.

Lo que yo deseo es que usted cumpla sus compromisos como yo cumplo los míos.

-Pues yo cumplo mi deber tratando de emancipar a mis hermanos de una odiosa tiranía, diciéndoles y probándoles que son libres, iguales ante Dios y ante la ley.

Yo cumplo estrictamente con lo que manda la santa madre Iglesia.

Cumplo con las órdenes de mi jefe, el Excelentísimo señor don Francisco Dionisio Vives, que, con la aprobación de S.

Además, si para apoyar la verdad de la sensacion apelo a los principios del raciocinio, ya salgo del terreno de las sensaciones, ya no pongo en estas la verdad primitiva orígen de las otras, no cumplo lo que habia ofrecido.

—Para servir yo a vuestra Majestad no es menester incitarme con otros premios que con aquellos que mis padres y mis pasados han alcanzado por haber servido a sus reyes, pero pues vuestra Majestad gusta que yo la sirva con nuevos deseos y pretensiones, querria saber en qué modo, en qué ejercicio podré mostrar que cumplo con la obligacion en que vuestra Majestad me pone.

No sé qué diablos ha sido esto, ni por dónde se ha entrado este amor que le tengo, siendo yo tan muchacha y él tan muchacho, que en verdad que creo que somos de una edad mesma, y que yo no tengo cumplidos diez y seis años, que para el día de San Miguel que vendrá dice mi padre que los cumplo.

Cumplo mi palabra.

Por estas hierbas cumplo veintisiete años y siete días de cornudo y le prometo a vuesa merced que, mediante Dios, me ha dado mil vidas.

Pasados veintitrés, la edad de Ramón, menos uno, cumplo sus deseos.

¿Cómo la cumplo desarmado? Sin duda ésta es una prueba a que me someten, esto encierra un arcano, y quisiera saber.

«Nada de cumplimientos -chillaba el cetáceo- ya saben ustedes que esa palabra significa cumplo y miento».

Con ello cumplo como hombre avisado y como padre cariñoso, y así me encuentro satisfecho, lo que se llama satisfecho hasta la hartura.

-Por anticipado, desde luego, mi señor don Alejandro continuó el farmacéutico sin hacer caso de la interrupción-, le prometo a usted que mi hijo cumplirá con su deber, como yo cumplo ahora, y he de cumplir en adelante, con el mío, eso es.

Cumplo con mi deber.

-Cumplo con un deber sagrado, amigo mío.

Yo bajo rara vez de las cimas de mis hermosas montañas para visitar a los mortales, pero cuando éstos me envían allá tantos y tantos deseos juntos, no puedo resistir y los cumplo casi siempre.

Si esto cumplo, Señor, con fuerza y brío,.

Como tiene trocados todos los frenos, dice de los cumplimientos que ya sabe lo que quiere decir cumplo y miento , llama a la urbanidad hipocresía, y a la decencia monadas, a toda cosa buena le aplica un mal apodo, el lenguaje de la finura es para él poco más que griego, cree que toda la crianza está reducida a decir Dios guarde a ustedes al entrar en una sala, y añadir con permiso de usted cada vez que se mueve, a preguntar a cada uno por toda su familia, y a despedirse de todo el mundo, cosas todas que así se guardará él de olvidarlas como de tener pacto con franceses.