Ejemplos con cebando

Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.

Señor Núñez, hace ya bastante tiempo que se está usted cebando en los defectos de los otros, de los que están ausentes.
y por último, a librarnos de la plaga de la langosta, pues en el Ministerio se ha presentado un proyecto muy útil, que el Gobierno hace suyo, y consiste en acabar con el maldito insecto cebando pavos.
A los que estaban cebando se les había enfriado la yerba, otros se fueron a dormir, mientras los menos cansados volvían hacia la mesa, donde la baraja, manoseada y vieja, esperaba el apretón cariñoso de las manos fuertes.
Sí, hombre, sí: has de saberte que toda la ley que tuve a mis hijos, y a su madre, y a tu padre, y a los míos, y que por tantos años ha estado como dormida en lo más hondo del corazón, se me ha despertado de repente, cebando su hambre envejecida en la única carne de la nuestra que conoce: en ti, para que lo sepas de una vez.
»Válese, pues, de esta arte con felicidad y se realza más con el artificio, gran treta suya no descubrirse toda de una vez, sino ir por brújula, pintando su perfección y siempre adelantándola, que un realce sea llamada de otro mayor, y el aplauso de una prenda, nueva expectación de la otra, y lo mismo las hazañas, manteniendo siempre el aplauso y cebando la admiración.
Miente el uno porque con el engaño espera adelantar sus negocios: dice verdad el otro para conseguir algo, cebando con ella a los demás para que le fíen mejor sus intereses.
Buscando a más de esto las más preciosas reses, íbanlas cebando para regalo del ejército, como también las aves, así de tierra como de las lagunas, cerradas en sus caponeras y vivares.
evaporando jactancias, cebando estimaciones y solicitando aplausos.
Contaban horrores de lo que pasaba, refinamientos de crueldad hacia cristianos y animales, como si una bandada de tigres se estuviera cebando en esos pagos.
Sentado en una cabeza de vaca, estaba ahí, cebando mate, un gaucho viejo, de luenga barba blanca, vestido como cualquier paisano pobre, y rodeado de unos cuantos galgos.
y por último, a librarnos de la plaga de la langosta, pues en el Ministerio se ha presentado un proyecto muy útil, que el Gobierno hace suyo, y consiste en acabar con el maldito insecto cebando pavos.
Ocupaba un puestito, donde cuidaba una majada que le había dado a interés un compatriota suyo, y ahí, solo en su rancho, sin más compañeros que sus perros y su inseparable pito de barro, de caño largo y de hornillo chico, pasaba la vida sin sobresaltos cocinando él mismo su pucherito, cebando su mate, cuidando su ropa, no sintiendo, probablemente, la necesidad, a los cuarenta y cinco años que por lo menos tenía, de formar familia, ni de complicar su vida tranquila con elementos de afuera.
Junto al brasero estaba un negrillo como de once años vestido con mucho aseo cebando un mate perfumado.
A la postre éste se aburre, desiste de continuar cebando la lámpara, y el dueño del derrotero se echa a buscar otro bobo cuya codicia explotar.
Patrocinio trajo una pava caliente, se sentó en medio de la pieza, y nos estuvo cebando dulces más de una hora.

© Todos los derechos reservados Buscapalabra.com

Ariiba