Ejemplos con bautizara
Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.
Allí George Blaurock pidió a Grebel que lo bautizara, a lo cual accedió y luego Blaurock lo bautizó a él y los demás asistentes.
Es también conocido como el Señor de Granada después de que el periodista de Radio Granada, Ideal y Localia TV Granada, Jorge Martínez lo bautizara así y conocido y reconocido por este cariñoso nombre por los granadinos y por ser la imagen del Nazareno más venerada popularmente en nuestra ciudad, teniendo el mayor número de promesas tras su imagen el día de salida, Lunes Santo, y numerosos devotos y fieles en sus besapies y cultos.
Eran estos religiosos dominicos, Fray José y Fray José Antonio Benítez de Toro y Zambrano, co-adjuntor el segundo de Pencahue y más tarde el ejecutor, constructor y el segundo párroco de nuestra iglesia parroquial y el que bautizara con el nombre de San Vicente Ferrer de Tagua-Tagua la fundación efectuada por Misiá Carmen.
Nació tan débil que se la creyó muerta, pero al presentarla al sacerdote para que la bautizara, este profetizó que llegaría a ser santa y Dios obraría grandes cosas a través de ella.
El mensaje esperanzador y a la vez crítico de sus poemas hizo que se lo bautizara como el poeta de la unidad nacional.
Su permanente actitud de ayudar a sus amigos, intelectuales con dificultades, artistas pobres, le valió que un día el pintor chileno Isaías Cabezón la bautizara como hormiga , por la cantidad de energía que desplegaba permanentemente.
El médico estuvo tres o cuatro veces a ver a la niñita y él fue quien trajo al padre Manjón, cura de la Salud, para que la bautizara.
A los pocos días llamó el señor al párroco para advertirle que por la tarde enviaría su hijo primogénito, recién nacido, para que le bautizara.
Melchor Portocarrero Laso de la Vega, conde de la Monclova y virrey de estos reinos del Perú y Chile, era hombre con quien cargaba una legión de diablos, siempre que llegaba a sus oídos el apodo con que lo bautizara el zumbón pueblo de Lima, no embargante que el tal apodo más tenía de honorífico que de ridículo, pues tengo para mí que enaltece a un guerrero el resultar lisiado en el campo de batalla.
Lo pasmoso para mí es que la autoridad marítima de España, en esos tiempos de exagerado espíritu religioso, hubiera consentido que se bautizara con tan altisonante nombre á barquichuelo de menguado porte.
Cierto era que ella misma el día anterior había dicho que no se le hablase de bautizo hasta que al chiquillo le pasara la fluxión de los ojos, pero al despertar aquella mañana y saber que Bonis, sin su permiso, dejándola con la calentura, se había marchado a la aldea a enderezar entuertos, que nunca se le había ocurrido enderezar, se había irritado, y por venganza y considerando que el tiempo estaba templado, había dispuesto, en un decir Jesús, desde la cama, dando órdenes como ella sabía, que el niño se bautizara aquella misma tarde, para que el padre se lo encontrara todo hecho y rabiara un poco.
Mariano Rosas le había sentado a su lado, le había concedido el permiso solicitado y le había rogado le bautizara su hija mayor, de la que yo sería padrino.
