Categoría gramatical / tiempo verbal de congratularon

Como Conjugación De Congratular

Verbo Transitivo

Los Verbos Transitivos son aquellos que necesitan de complemento para tener sentido pleno.

Verbo Pronominal

Los Verbos Pronominales son aquellos que se conjugan junto a un pronombre átono.

2ª Persona Plural Del Pretérito Perfecto De Indicativo De Congratular

El Pretérito Perfecto de Indicativo se utiliza para hablar de acciones que tuvieron lugar en el pasado y ya han concluido en el momento en el que se habla. Veamos algunos ejemplos:

• Ya te dije todo lo que necesitabas hacer.
• Juan vino ayer a darme todas las explicaciones.

Como Conjugación De Congratular

Verbo Transitivo

Los Verbos Transitivos son aquellos que necesitan de complemento para tener sentido pleno.

Verbo Pronominal

Los Verbos Pronominales son aquellos que se conjugan junto a un pronombre átono.

3ª Persona Plural Del Pretérito Perfecto De Indicativo De Congratular

El Pretérito Perfecto de Indicativo se utiliza para hablar de acciones que tuvieron lugar en el pasado y ya han concluido en el momento en el que se habla. Veamos algunos ejemplos:

• Ya te dije todo lo que necesitabas hacer.
• Juan vino ayer a darme todas las explicaciones.

Ejemplos con la palabra Congratularon

Pronto se supo en todas partes la suerte que le había tocado a don Joaquín y todos se congratularon de que en él hubiese caído por haberlo merecido tanto con su bondad y su genio servicial.

Mientras que la clase política portuguesa, el Vaticano y Amnistía Internacional se congratularon por ello, el gobierno del general Suharto dijo que la decisión era injustificada y no tenía fundamento.

Los principales líderes mundiales acogieron el plan de estímulo con beneplácito y los analistas económicos se congratularon por su magno tamaño y considerando que que si China impulsa su propia economía, ayudaría a estabilizar la economía mundial.

Cristóbal Medina y otros que acudieron a ofrecerse, se congratularon de la mansedumbre del hijo de doña Sales, atribuyéndola a la natural doma ejercida sin palo ni piedra por la desgracia, y al influjo del sentimiento religioso, amigo y familiar de la muerte, el cual nunca se queda a la puerta, cuando ésta, entra en palacios o cabañas.