Ejemplos con estertores

Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.

En los últimos estertores del imperio, ya reducido a un puñado de ciudades portuarias, los restos de su poder naval fueron clave para mantener dichas posiciones hasta el último sitio de Constantinopla.
Según quienes tuvieron acceso a sus habitaciones, el Santo Padre permaneció sereno y lúcido pese a la insuficiencia respiratoria y a los estertores que anunciaban su muerte, hasta que a las siete de la tarde perdió el conocimiento.
Durante el examen físico, el paciente con neumonía puede presentar frecuencia respiratoria elevada, cierta matidez torácica a la percusión, el murmullo que se ausculta normalmente en el pulmón se acompaña de ruidos adicionales como sibilantes o estertores crepitantes, la voz del enfermo tiene sonidos peculiares a la auscultación: egofonía una resonancia que recuerda el balido de una cabra , pectoriloquia que son sonidos aumentados cuando la persona susurra y, ocasionalmente, el roce pleural.
Entre estertores, Vaina le dice a Magneto que Mr.
Su agonía duró cuarenta y ocho horas, ennegreciéndose lentamente con la expansión de la sangre envenenada, aullando entre nerviosos estertores, doblándose como un arco sobre la cabeza y los pies, que se clavaban en el lecho.
Una hora antes de amanecerla hora fatal en los hospitales, cuando el día apunta y el moribundo se extingue, los estertores de agonía murmuraban siempre el mismo deseo: .
Le subía este grito a la garganta con estertores dolorosos.
Eran las máquinas, que lanzaban estertores agónicos, al mismo tiempo que huía por la chimenea un torrente de humo denso como tinta.
La pobre doña Luisa lloraba abrazada a él, colgándose de su cuello con estertores de emoción.
Una rompió a llorar con estertores histéricos.
Fernando vio los estertores de su pecho y sintió en su cuello el contacto de una lágrima.
Se ahogaba, su pecho agitábase con los estertores de una tos cavernosa.
Somos un pueblo triste, Gabriel: lo llevamos en la médula, no sabemos cantar si no es amenazando o llorando, y la canción es más hermosa cuando tiene más suspiros, hipos dolorosos y estertores de agonía.
Una vela torcida goteaba sobre los pies de la escultura sus lágrimas de cera, y el débil resplandor verdoso de una lámpara de vidrio, medio apagada, enviaba estertores de luz a la divina faz.
Le subía este grito á la garganta con estertores dolorosos.
En una mañana de enero, en tanto que la máquina lanzaba sus jadeantes estertores y las blancas volutas del vapor se desvanecían en el aire tibio convirtiéndose en lluvia finísima, un hombre subía por el camino en dirección a la mina.
-Mientras el animal en los estertores de la agonía azota la cabeza en la ensangrentada hierba, Quilapán después de una terrible lucha, agobiado por el número, ha sido derribado y maniatado sólidamente.
y —«¡ay de mi Alhama!» —clama con estertores.
Ojos desorbitados, dedos alargados crispándose, bocas al máximo de sus estertores.
La penumbra se va haciendo más densa y su mente febril parece escuchar los estertores últi-mos de la estrangulada cada vez más cercanos.
Allí, lo levantó, lo hizo pasar a fuera, pasó él, y en el pastito verde y tupido, le cortó la garganta y lo dejó desangrarse y patalear, en los últimos estertores de la muerte, mientras iba él a buscar la chaira, y que los perros, ávidos, sorbían en el suelo, la sangre espumante, a medida que iba saliendo en borbollones.
Por mí que se la corten, pero maldito lo que se conseguirá con ello, porque el amor lúgubre, entre estertores agónicos y sangre de criaturas infelices, no es enfermedad de Soleilland, sino epidemia que se ha extendido a toda Francia.
Una hora antes de amanecer—la hora fatal en los hospitales—, cuando el día apunta y el moribundo se extingue, los estertores de agonía murmuraban siempre el mismo deseo: «Mademoiselle.
Su agonía duró cuarenta y ocho horas, ennegreciéndose lentamente con la expansión de la sangre envenenada, aullando entre nerviosos estertores, doblándose como un arco sobre la cabeza y los pies, que se clavaban en el lecho.
Entonces la fuerza vital que residía en él salió de su cuerpo con gran estrépito, estertores y convulsiones, hasta el punto de que la joven abrió de repente los ojos y me vio con el cuchillo lleno de sangre en la mano.
Tales debieron ser los choques entre los primeros grupos humanos: riña de fieras en rebaño, disputa a garrazo y dentellada limpios de unos cubiles o una presa, remolino confuso de brazos que vienen y van repartiendo la muerte, de voces que se insultan, de gritos victoriosos y de agónicos estertores: un montón de carne y harapos desgarrándose brutalmente ante la Naturaleza impasible.
Y cesó la lucha, cesaron los últimos estertores y con ellos, las borrascas de la vida: descansa ahora, descansa profundamente, después del largo y penoso galope de la vida.
Cadet pudo suponer asimismo que el cesar los estertores era consecuencia de haber pasado el viajero a mejor vida que la que se lleva en trenes con vistas al asesinato, pero prefirió pensar que al viajero se le había quitado el dolor, que él supuso de tripas, y que, en realidad, era de los coscorrones que le habían dado en la cabeza con un martillo.
Cadet que, suponiendo que el viajero se había puesto malo, pensó ofrecerle una copa de aguardiente, del que llevaba consigo, habiendo desistido de la idea porque inmediatamente después de los estertores hubo un silencio sepulcral!.
Cadet en su coche, vecino del que ocupaba el señor Leuthreau, oyó gritos sofocados y estertores de agonía, y cuenta el mismo Sr.

© Todos los derechos reservados Buscapalabra.com

Ariiba