Ejemplos con denso
Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.
El drenaje es denso, dendrítico, o subparalelo.
La gama va de un amarillo limón a un rojo profundo y denso, a veces llamado púrpura cadmio.
La luz del sol no suele alcanzar el suelo de este denso bosque.
Es muy oscuro, cuasi negro, denso, espeso y viscoso.
En esta parte, definida geomorfológicamente por llanuras detríticas, han recibido la máxima protección legal diferentes zonas de encinar denso y adehesado y de pinares de repoblación:.
el denso bosque marítimo, considerado la más extensa masa forestal litoral de Europa y que, protegido por el Estado, ocupa el Parque Natural de las Landas de Gascuña.
El yacimiento principal es la cueva de Ojo Guareña, ubicada en un amplio y denso complejo kárstico en la zona meridional de la Cordillera Cantábrica.
En mayo se dirigía al nuevo ministro de Instrucción Pública, Marcelino Domingo, en un largo y denso comunicado del que interesa destacar tres aspectos:.
Para entenderlo gráficamente, podríamos decir que, desde lo más sutil hasta lo más denso, se va dando un proceso de gradación hasta que se plasma lo etéreo en lo material.
El nombre de tomentosa, viene del latín tomentosus-a-um queriendo decir con tomento, en referencia del denso tomento del envés de las hojas.
La densa capa de grasa subcutánea de todos ellos y el tupido y denso pelaje de muchas de las especies actúan de aislante térmico de manera muy efectiva.
Se prevé un barrio de viviendas muy denso.
A los pies de la Rocca Salvatesta se extiende un denso bosque de pinos, llamado el bosque por la población local y protegidas por guardias y los trabajadores del bosque.
A sus pies la sombra del coloso daba a las aguas un color denso y transparente a la vez.
Una voz femenina sonó a lo lejos, como un cristal, cortando el denso silencio de las primeras horas de la tarde, cargado de vibraciones de calor y de luz.
La mañana pasábala en San José, y uno de sus placeres era permanecer en el claustro de la iglesia viendo entrar y salir al gentío, gozando de la fresca sombra de los arcos, mientras unos pasos más allá ardía la tierra con la reverberación solar, mecían sus ramas los árboles lentamente, como angustiadas por el calor y el polvo que cubría sus hojas, y el ambiente denso parecía ser mascado antes de descender a los pulmones.
Se abrió, dando paso a una ráfaga de viento cargada de lluvia, que hizo estremecerse las luces del candil y refrescó el denso ambiente de la cocina.
Quiso levantarse, y sus manos, al palpar el suelo, chapotearon en un barro denso y caliente.
¡Cuánto tiempo que no había entrado allí! En este ambiente denso de pieza cerrada creyó percibir un vago olor de esencias, de bote de perfumes abierto y abandonado, un olor que le hizo recordar a las solemnes damas de la familia cuyos retratos estaban en el recibimiento.
Frente por frente de la puerta de entrada, hay en el muro una ménsula de madera de pino, sobre ella, una estatuilla, desdichada, de San José, en cartón piedra, al pie del santo, media docena de judías, media docena de garbanzos y un frasquito, con un líquido oliváceo y denso, y una etiqueta que dice:.
Yo no sé de ningún gran poeta español a quien se le haya ocurrido ungirse con el óleo denso y aromoso de la poesía cristiana.
Sobre unos campos, el enjambre era denso, en otros, formaba pequeños grupos.
Eran las máquinas, que lanzaban estertores agónicos, al mismo tiempo que huía por la chimenea un torrente de humo denso como tinta.
Pero las brechas se cerraban instantáneamente, y el banco viviente seguía su camino cada vez más denso, como si desafiase a la muerte.
Y este estremecimiento de huracán invisible parecía más extraño en el ambiente cerrado y bien calafateado de los salones, cada vez más denso y tibio por la respiración de las gentes, el humo de los cigarros y el vaho de las tazas.
La puerta estaba cada vez más roja, el humo era más denso.
La mancha se agrandaba, tenía una forma parecida a la puerta de su , y salía por ella un humo denso, nauseabundo, un hedor de paja quemada que le impedía respirar.
Los pasos de los transeúntes sonaban en las aceras como un áspero y ruidoso frotamiento, y aglomerábase la gente en las puertas de los templos, negras y profundas bocas que lanzaban a la fría calle el denso vaho de su interior.
El humo de la , denso y pegajoso, les hizo toser, pero se detuvieron ante el rescoldo enorme como un brasero de gigantes.
El velo tenía que ser muy denso porque la franqueza de Fortunata arrojaba luz vivísima sobre los sucesos referidos, y su pintoresco lenguaje los hacía reverberar Dio ella entonces algunos cortes a su relación, comiéndose no ya las letras sino párrafos y capítulos enteros, y he aquí en sustancia lo que dijo: Torrellas, el célebre paisajista catalán, era tan celoso que no la dejaba vivir.
