Ejemplos con atestiguo

Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.

Hay poca duda en mi mente de que El Dorado era el resultado de mirar el avance lento pero irreversible del desarrollo humano y de la explotación del medio natural, como atestiguo particularmente en la California rural.
Atestiguo que esta mujer ha sido asesinada.
-Ante Dios y ante los hombres, acuso a esta mujer de haberme empujado a asesinar al barón de Wardes, y como nadie estuvo allí para atestiguar la verdad de esta acusación, lo atestiguo yo mismo.
No atestiguo: refiero.
Ella bajó la cabeza, y levantándola de pronto, dijo: ¡Lo pasado será, para en lo sucesivo, un misterio de la fe islámica, pues yo alzo el dedo y atestiguo que no hay más Dios que Alah, y que Mahomed es el enviado de Alah! Y pronunció así oficialmente el acto de nuestra fe, ¡y en el momento se ennobleció con el Islam!.
Luego añadió: ¡Y por cierto ¡oh amo nuestro! que el honorable herrador puede dar testimonio del trato bárbaro que quería hacerme sufrir ese judío! ¡Y mis doncellas confirmarán mis palabras! ¡Por lo que a mí respecta, soy una musulmana, una creyente, y atestiguo que no hay más Dios que Alah y que Mohamed es el Enviado de Alah!.
Y Nur, lleno de dicha por haber contribuido así, en la medida de sus fuerzas, a convertir a la princesa franca, le dijo: ¡Oh mi señora! ¡nuestra religión es sencilla e ignora las complicaciones externas! ¡Tarde o temprano, reconocerán todos los descreídos la superioridad de nuestras creencias, y se encaminarán a nosotros por sí mismos, como se sale de las tinieblas a la luz, de lo incomprensible a lo claro y de lo imposible a lo natural! En cuanto a ti, ¡oh princesa de bendición! para lavarte de la mugre cristiana, no tienes más que pronunciar estas palabras: ¡No hay más Dios que Alah y Mohamed es el Enviado de Alah! ¡Y al instante te volverás creyente musulmana! Al oír estas palabras, la princesa Mariam, hija del rey de los francos, levantó el dedo y pronunció: ¡Atestiguo y certifico que no hay más Dios que Alah y que Mohamed es el Enviado de Alah! ¡Y al instante se ennobleció con el Islam! ¡Gloria a Quien con procedimientos sencillos abre los ojos de los ciegos, torna sensibles los oídos de los sordos, desata la lengua de los mudos y ennoblece los corazones pervertidos, al Dueño de las virtudes, al Distribuidor de gracias, al Bueno para sus creyentes! ¡Amín!.
Ya ve usted que no atestiguo con muertos.
Atestiguo que no hay más divinidad que Dios.
Atestiguo que Muhammad es el Mensajero de Dios.
Yo atestiguo que no hay más a que un Dios.
Yo atestiguo que Mahoma es el Profeta.

© Todos los derechos reservados Buscapalabra.com

Ariiba