Ejemplos con arábigo
Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.
En Oriente Medio, la operación de Kroll se gestiona a través de su oficina en Dubái, que ofrece consultoría de riesgo a largo de tódo el Golfo Arábigo, llegando hasta Egipto y el Levante.
Limita por el suroeste con las aguas del mar Arábigo, al noroeste con el golfo de Kutch y al sureste por el golfo de Jambhat.
El término arábigo saddiq, posee una fonética y etimología similares.
Este punto arábigo genera desconciertos y dudas.
Este punto arábigo es muy conocido.
Un Punto arábigo en una carta astral es un punto incorpóreo, que es de bastante importancia para la interpretación astrológica.
Hizo expediciones fuera de Egipto y se han encontrado huellas de su paso por el desierto arábigo, en el camino que conduce al mar Rojo.
El Mar Arábigo también llamado Mar de Arabia forma parte del Océano Índico, entre la Península Arábiga e India.
Está ubicado en el sur del distrito de Thiruvananthapuram, en el norte de Pathanamthitta y Alappuzha, en el este de Tamil Nadu y al oeste con el Mar Arábigo.
La palabra proviene del arábigo español ¨amís.
Los musulmanes, como también en menor medida los cristianos y los judíos, contribuyeron con el folclor arábigo y se distanciaron entre sí de acuerdo a sus dogmas filosóficos más que por sus doctrinas religiosas.
También son comunes sitios de anidación en ambos extremos del Mar Arábigo, ambos en Ash Sharqiyah, Omán, y a lo largo de la costa de Karachi, Pakistán.
El sur del país es una zona costera sobre el Mar Arábigo.
Quedamos todos confusos y alegres con lo sucedido, y, como ninguno de nosotros no entendía el arábigo, era grande el deseo que teníamos de entender lo que el papel contenía, y mayor la dificultad de buscar quien lo leyese.
Cuenta Cide Hamete Benengeli, autor arábigo y manchego, en esta gravísima, altisonante, mínima, dulce e imaginada historia que, después que entre el famoso don Quijote de la Mancha y Sancho Panza, su escudero, pasaron aquellas razones que en el fin del capítulo veinte y uno quedan referidas, que don Quijote alzó los ojos y vio que por el camino que llevaba venían hasta doce hombres a pie, ensartados, como cuentas, en una gran cadena de hierro por los cuellos, y todos con esposas a las manos.
Si a ésta se le puede poner alguna objeción cerca de su verdad, no podrá ser otra sino haber sido su autor arábigo, siendo muy propio de los de aquella nación ser mentirosos, aunque, por ser tan nuestros enemigos, antes se puede entender haber quedado falto en ella que demasiado.
Con esta imaginación, le di priesa que leyese el principio, y, haciéndolo ansí, volviendo de improviso el arábigo en castellano, dijo que decía: Historia de don Quijote de la Mancha, escrita por Cide Hamete Benengeli, historiador arábigo.
