Categoría gramatical / tiempo verbal de hilaban

Como Conjugación De Hilar

Verbo Transitivo

Los Verbos Transitivos son aquellos que necesitan de complemento para tener sentido pleno.

2ª Persona Plural Del Pretérito Imperfecto De Indicativo De Hilar

El Pretérito Imperfecto de indicativo se utiliza para hablar de acciones que tuvieron inicio en un pasado no concreto y cuyo fin tampoco se concreta. También se utiliza para dar énfasis de continuidad a acciones del pasado. Veamos algunos ejemplos:

• Mientras pasaba por delante de la ventana, yo la miraba atentamente. Aquí se utiliza para expresar una situación que tuvo inicio en el pasado y cuyo fin no se concreta
• Siempre estaba dispuesto a ayudarme cuando lo necesitaba. Aquí se utiliza para dar énfasis de continuidad a una acción

Como Conjugación De Hilar

Verbo Transitivo

Los Verbos Transitivos son aquellos que necesitan de complemento para tener sentido pleno.

3ª Persona Plural Del Pretérito Imperfecto De Indicativo De Hilar

El Pretérito Imperfecto de indicativo se utiliza para hablar de acciones que tuvieron inicio en un pasado no concreto y cuyo fin tampoco se concreta. También se utiliza para dar énfasis de continuidad a acciones del pasado. Veamos algunos ejemplos:

• Mientras pasaba por delante de la ventana, yo la miraba atentamente. Aquí se utiliza para expresar una situación que tuvo inicio en el pasado y cuyo fin no se concreta
• Siempre estaba dispuesto a ayudarme cuando lo necesitaba. Aquí se utiliza para dar énfasis de continuidad a una acción

Ejemplos con la palabra Hilaban

Las mujeres hilaban, tejían y adornaban ellas mismas los elementos que eran necesarios en un hogar: manteles, sábanas, vestidos, ropa interior.

Entre los útiles confeccionaban cestas, cacharros de cerámica, tallaban la madera, hilaban redes y manufacturaban el oro, abundante en los ríos de Cuba, La Española y Puerto Rico.

Hermès supervisaba la producción de sus pañuelos de comienzo a fin: compraban seda china en bruto, la hilaban y la tejían dos veces para hacerla más resistente y densa que la mayoría de los productos similares en el mercado.

Descalzas y pisando de lado, como recelosas, iban entrando algunas, con la cabeza resguardada por una especie de mandilón de picote, muchas gemían de gusto al acercarse a la deleitable llama, otras, tomando de la cintura el huso y el copo de lino, hilaban después de haberse calentado las manos, o sacando del bolsillo castañas, las ponían a asar entre el rescoldo, y todas, empezando por cuchichear bajito, acababan por charlotear como urracas.