Buscar Poemas con Enojoso


  ·En el buscador de poemas puedes encontrar entre más de doce mil poemas todos aquellos que contienen las palabras de búsqueda. Los poemas forman parte de la antología poética de los 344 poetas más importantes en lengua Española de todos los tiempo. Puedes elegir entre dos tipos de búsqueda:
  ·Buscar entre todos los poemas los que contienen las palabras de la búsqueda.
  ·Buscar sólo los poemas cortos -aquellos que tienen 8 versos o menos- que coinciden con el criterio de búsqueda.

Se han encontrado 8 poemas con la palabra enojoso

Si lo prefieres puedes ver sólo los poemas cortos, aquellos que tienen ocho versos o menos aquí

Lope de Vega

sufre la tempestad el que navega

-- de Lope de Vega --

Sufre la tempestad el que navega
el enojoso mar, y el viento incierto
con la esperanza del alegre puerto,
mientras la vista a sus celajes llega.
En la libia calor, hielo en noruega,
de sangre, de armas y sudor cubierto,
sufre el soldado; el labrador despierto
al alba el campo cava, siembra y riega.
El puerto, el saco, el fruto, en mar, en guerra,
en campo, al marinero y al soldado
y al labrador anima y quita el sueño.
Pero triste de aquel que tanto yerra,
que en mar y en tierra, helado y abrasado,
sirve sin esperanza ingrato dueño.

Poema sufre la tempestad el que navega de Lope de Vega con fondo de libro

Gustavo Adolfo Bécquer

rima xxvii

-- de Gustavo Adolfo Bécquer --

Despierta, tiemblo al mirarte:
dormida, me atrevo a verte;
por eso, alma de mi alma,
yo velo cuando tú duermes.
Despierta, ríes y al reír tus labios
inquietos me parecen
relámpagos de grana que serpean
sobre un cielo de nieve.
Dormida, los extremos de tu boca
pliega sonrisa leve,
suave como el rastro luminoso
que deja en sol que muere.
¡Duerme!
despierta miras y al mirar tus ojos
húmedos resplandecen,
como la onda azul en cuya cresta
chispeando el sol hiere.
Al través de tus párpados, dormida;
tranquilo fulgor vierten
cual derrama de luz templado rayo
lámpara transparente.
¡Duerme!
despierta hablas, y al hablar vibrantes
tus palabras parecen
lluvia de perlas que en dorada copa
se derrama a torrentes.
Dormida, en el murmullo de tu aliento
acompasado y tenue,
escucho yo un poema que mi alma
enamorada entiende.
¡Duerme!
sobre el corazón la mano
me he puesto porque no suene
su latido y en la noche
turbe la calma solemne:
de tu balcón las persianas
cerré ya porque no entre
el resplandor enojoso
de la aurora y te despierte.
¡Duerme!

Poema rima xxvii de Gustavo Adolfo Bécquer con fondo de libro

Gutierre de Cetina

temía hasta aquí de entristecerme

-- de Gutierre de Cetina --

Cansada el alma ya de un luengo llanto;
érame hasta aquí visión de espanto
ver un pesar y no saber valerme.
Mas agora que vos holgáis de verme
triste, ningún placer procuro tanto;
hora me es enojoso el dulce canto
y alegre aquél que ya solía ofenderme.
Dama, pues de mi bien sois tan esquiva,
descanso me será cualquier tormento
que de tan alta causa se deriva.
Pero tengo temor que, de contento,
el rostro, cuando en más tristeza viva,
muestre al revés señal de lo que siento.

Poema temía hasta aquí de entristecerme de Gutierre de Cetina con fondo de libro

Gutierre de Cetina

estrella que mi mal todo influiste

-- de Gutierre de Cetina --

Del bien que ya pasó eclipsada esfera,
que al florir de mi verde primavera
en invierno enojoso convertiste.
Sigue tu curso pues, obscuro y triste,
muéstrate, si sabrás, airada y fiera,
que yo siempre seré el que antes era
y tú ya no serás quien siempre fuiste.
De mal vaya a peor mi mala suerte,
que no podrá estorbarme aquella gloria
que en la mente quedó del bien perdido;
salvo si de piedad hace la muerte
que pague con la vida la memoria
el lago obscuro del eterno olvido.



Gutierre de Cetina

aquel nudo que ya debía ser suelto

-- de Gutierre de Cetina --

Después que pude ver claros mis daños,
llevándose tras sí los tristes años
en perpetua prisión me tiene envuelto.
¿Quién pensará jamás viendo tan vuelto,
tan mezclado un amor con mil engaños,
pudiera el corazón en tan extraños
lazos permanecer preso y revuelto?
mas si la voluntad de un firme amante
puede el tiempo mudar, si libre verme
puedo una vez de este enojoso nudo,
de aquel mismo valor, de aquel diamante
que es agora mi fe, pienso hacerme
a los ojos un yelmo, al alma escudo.



Gutierre de Cetina

fuego queme mi carne y por encienso

-- de Gutierre de Cetina --

Baje el humo a las almas del infierno;
pase la mía aquel olvido eterno
de lete porque pierda el bien que pienso;
»el fiero ardor que hora me abrasa intenso
ni melle corazón ni haga tierno;
niégueme pïedad, favor, gobierno
el mundo, amor y el sumo dios inmenso;
»mi vivir sea enojoso y trabajado,
en estrecha prisión dura y forzosa,
siempre de libertad desesperado,
»si viviendo no espero ya ver cosa
dijo vandalio, y con verdad jurado,
que sea cual tú, amarílida, hermosa».



Gutierre de Cetina

ay, qué plazo tan largo y tan extraño

-- de Gutierre de Cetina --

Ay, qué término luengo y enojoso,
ay, qué tiempo prolijo y trabajoso,
ay, qué tardío remedio a tan gran daño!
¡ay, salud perezosa y con engaño,
ay, cruel dilatar tan peligroso,
ay, pesado esperar triste y forzoso
ay, qué día mayor que el mayor año!
si el sol para el extraño nacimiento
del hijo de alcumena anduvo errando,
en una dos jornadas convirtiendo,
¿por qué no pasa agora en un momento
ésta que tanto bien va dilatando,
o hace que la pase yo durmiendo?



Evaristo Carriego

Reproche musical

-- de Evaristo Carriego --

Si te sientas como anoche junto al piano,
a mis ruegos insensible, taciturna:
fugitiva de aquel aire wagneriano
que tú sabes. Si, cual trágica nocturna,

traes la sombra del mutismo caprichoso
de unos celos singulares y tardíos,
volveremos a rozar el enojoso
viejo tema del porqué de tus hastíos.

¿Ves, amada? Ya se ha oído la sombría
voz solemne del Maestro: ya ha asomado
su faz grave la orquestal Melancolía,
y el esplín contagia el alma del teclado.

Deja ¡loca! de tocar... Risueñamente,
ven y cura tus neurosis, flor de anemia,
con las risas que destilan el ardiente
rojo filtro de la música bohemia:



© Todos los derechos reservados Buscapalabra.com

Ariiba