Ejemplos con trabajo

Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.

En una hora interrumpiré mi trabajo.
¿Verdad, Basilisa? No oye misa, y eso que ningún trabajo le costaba, puesto que podría oírla sin salir de casa.
Para no distraerse en su trabajo, se abstenía de cantar y jamás provocó riñas.
Junto a la rampa de bajada estaban los animales de desecho: asnos sin orejas, de pelo sucio y asquerosas pústulas, caballos tristes, cuyo pellejo parecía agujerearse con lo anguloso de la descarnada osamenta, mulas cegatas, con cuello de cigüeña, toda la miseria del mercado, los náufragos del trabajo, que, con el cuero rayado a palos, el estómago contraído y las excoriaciones inflamadas por las moscas verdosas y panzudas, esperaban la llegada del contratista de las corridas de toros o del mendigo, que aún sabrían utilizarlos.
, cazador de pájaros con liga, enemigo del trabajo y terror de la contornada, no pudo conservar su gravedad impasible de gran señor ante tan inesperada noticia.
Y no pudiendo con todo el trabajo, dejaba improductiva y en barbecho la mitad de su tierra feraz, pretendiendo con el cultivo de la otra mantener a la familia y pagar al amo.
Y completamente solo, ocultando a la familia su situación, teniendo que sonreir cuando estaba entre su mujer y sus hijas, las cuales le recomendaban que no se esforzase tanto, el pobre se entregó a la más disparatada locura del trabajo.
Las consecuencias de su locura por el trabajo no se hicieron esperar.
, animado por la posesión de un nuevo rocín joven y brioso, volvió con más ahinco a su trabajo, a matarse sobre aquellos terruños, que parecían crecer según disminuían sus fuerzas, envolviéndolo como un sudario rojo.
¡Nadie se aprovecharía de su trabajo! Y así estuvo hasta cerca del amanecer, cortando, aplastando con locos pataleos, jurando a gritos, rugiendo blasfemias, hasta que al fin el cansancio aplacó su furia, y se arrojó en un surco llorando como un niño, pensando que la tierra sería en adelante su cama eterna y su único oficio mendigar en los caminos.
No sólo dejaban el trabajo, sino que pasaban aviso a todos sus paisanos para que huyesen de ganar un jornal en los campos de , como quien huye del diablo.
Y el duro pan parecía más sabroso, el vino mejor, el trabajo menos pesado, imaginándose las rabietas de los dos avaros, que con todo su dinero habían de sufrir que los rústicos de la huerta se burlasen de ellos.
Quiso distraerse con el trabajo, y se entregó con toda su voluntad a la obra que llevaba entre manos: una pocilga levantada en el corral.
Todos querían tomar parte en este trabajo, que parecía una fiesta.
Roseta era da toda la familia la más parecida a su padre: una fiera para el trabajo , como decía Batiste de sí mismo.
Se portó como persona honrada en la época peor, cuando, recién establecida la familia en la barraca, había que arar la tierra maldita, petrificada por diez años de abandono, cuando había que hacer continuos viajes a Valencia en busca del cascote de los derribos y las maderas viejas, cuando el pasto no era mucho y el trabajo abrumante.
De todos los extremos de la vega llegaban chirridos de ruedas, canciones perezosas interrumpidas por el grito que arrea a las bestias, y de vez en cuando, como sonoro trompetazo del amanecer, rasgaba el espacio un furioso rebuzno del cuadrúpedo paria, como protesta del rudo trabajo que pesaba sobre él apenas nacido el día.
¿Qué vida le daba ? ¿Siempre tan borracho y huyendo del trabajo? Ella se lo había buscado, casándose contra los consejos de todo el mundo.

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