Ejemplos con ternera

Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.

Mientras se apoyaba contra la pared de otra casa escuchó a un cocinero que estaba cociendo trozos de ternera en un caldero, que comentaba que había un trozo que por mucho que intentara sumergir en el agua hirviendo, siempre volvía a subir.
Se trata de una pasta de sémola de trigo o harina mezclada con mantequilla, huevos y leche o agua a la que se añade bien algún tipo de carne como ternera, ave, pescado o bien médula ósea.
Las Órcadas exportan carne de ternera, queso, whisky, cerveza, pescado y mariscos.
Los restaurantes cantonenses en los EEUU a menudo sirven los espárragos preparados por el método anteriormente mencionado, acompañados de pollo, gambas o ternera.
Usada en el fricandó, típico guiso catalán de ternera con setas.
La carne que se suele usar es preferiblemente de ternera, por su textura suave y su sabor.
Las hamburguesas son de tierra de ternera.
Además: Conejo a la cortijera, Choto serrano, Pavo asado con manzanas, Rabo de Toro, Pepitoria de gallina, Perdices adobadas en escabeche, Perdices en salmorejo, Perdiz del pastor, Pollo salteado al vino de Málaga, Solomillo de cerdo a la malagueña, Vaca mechada, Sesos de ternera rebozados.
El animal no era agresivo hacia la familia de los Gorman, pero cuando el lobo intentó capturar a una ternera, el señor Gorman disparó a la criatura.
En ocasiones, es considerada como carne blanca la carne de crías de mamíferos como la de ternera, cordero o cerdo lechal, y como carne roja, la carne de pato o ganso u oca.
Así, tenemos formas llamadas Presente anterior con las que hacemos referencia a hechos sucedidos hace muy poco: Hoy he comido estofado de ternera.
Esta especie ha soportado durante décadas una fuerte explotación pesquera, debido a que su carne es muy buena y está considerada una delicia, en ciertos países se la conoce comúnmente como ternera de mar.
A Teporaca se unieron otros capitanes indios como Ochavari, Frasquito, Ternera, y Nicolasillo.
Existen versiones no-veganas que pueden contener huevos, ccarne de ternera, mozzarella u otros tipos de queso.
En la una, las patatas amarillentas, los reventones garbanzos sacando fuera del estuche de piel su carne rojiza, la col, que se deshacía como manteca vegetal, los nabos blancos y tiernos, con su olorcillo amargo, y en la otra fuente las grandes tajadas de ternera, con su complicada filamenta y su brillante jugo, el tocino temblón como gelatina nacarada, la negra morcilla reventando, para asomar sus entrañas al través de la envoltura de tripa, y el escandaloso chorizo, demagogo del cocido, que todo lo pinta de rojo, comunicando al caldo el ardor de un discurso de club.
Está fermentando y no hay quien lo pase Si el señorito Maxi viniese antes de que esté de vuelta, le pones de principio una de las dos chuletas de ternera, la más crecidita, y de postre le sacas las pastas que trajo el bollero esta mañana, y la carne de membrillo que yo tomo.
Lo que doña Lupe llamaba el era excelente: riñones salteados, sesos, merluza o pajeles, si los había, chuletas de ternera, filete a la inglesa Esto corría de cuenta de la viuda, y Fortunata se comprometió a hacer una paella.
La carne que a él le tentaba era otra, la de ternera por ejemplo, y la de cerdo más, en buenas magras, chuletas riñonadas o solomillo bien puesto con guisantes.
Compró chuletas de ternera, dos reales de menudillos y unas sardinas escabechadas para segundo plato.
Allí se asaban las chuletas de ternera, que con la chamusquina en tan viva lumbre, despedían un olor apetitoso.
También quisiera una buena lengua de vaca, , y ver si hay ternera fina.
El vicio aquel tenía sus depravaciones, porque la señora de Santa Cruz no sólo iba a las tiendas de lujo, sino a los mercados, y recorría de punta a punta los cajones de la plazuela de San Miguel, las pollerías de la calle de la Caza y los puestos de la ternera fina en la costanilla de Santiago.
¡Nicolasa! ese pedazo de ternera que está en el aparador.
Lo que real y verdaderamente tengo son dos uñas de vaca que parecen manos de ternera, o dos manos de ternera que parecen uñas de vaca, están cocidas con sus garbanzos, cebollas y tocino, y la hora de ahora están diciendo: ¡Coméme! ¡Coméme!.
Desa manera dijo Sancho, no faltará ternera o cabrito.
Entregóse en todo con más gusto que si le hubieran dado francolines de Milán, faisanes de Roma, ternera de Sorrento, perdices de Morón, o gansos de Lavajos, y, entre la cena, volviéndose al doctor, le dijo:.
Con esto quedó contento el gobernador, y esperaba con grande ansia llegase la noche y la hora de cenar, y, aunque el tiempo, al parecer suyo, se estaba quedo, sin moverse de un lugar, todavía se llegó por él el tanto deseado, donde le dieron de cenar un salpicón de vaca con cebolla, y unas manos cocidas de ternera algo entrada en días.
De aquella ternera, si no fuera asada y en adobo, aún se pudiera probar, pero no hay para qué.
Cuanto más, que podría ser que fuesen estas truchuelas como la ternera, que es mejor que la vaca, y el cabrito que el cabrón.

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