Ejemplos con pesados

Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.

canta el laude pascual, no más duelo, no más lágrimas, no más pesados dolores.
Así se consolaba el patrón de no haber mandado en su vida mas que pesados y robustos laúdes, iguales a las naves de otros siglos, en los que llevaba vino a Cette o cargaba cosas prohibidas en Gibraltar y la costa de África.
¡A trabajar! Los campos estaban perdidos, había allí mucho que hacer, pero ¡cuando se tiene buena voluntad! Y desperezándose, este hombretón recio, musculoso, de espaldas de gigante, redonda cabeza trasquilada y rostro bondadoso sostenido por un grueso cuello de fraile, extendía sus poderosos brazos, habituados a levantar en vilo los sacos de harina y los pesados pellejos de la carretería.
Acudió, pues, Villamelón presuroso, como siempre, a la menor indicación de Currita, envuelto en su fresca bata escocesa, que apenas le pasaba de la cintura, venía con él uno de esos magníficos perrazos de Kamschatka, de un blanco amarillento, que arrastran en su país pesados trineos, y había sido el paje continuo de Currita en una larga temporada en que le pareció muy espiritual hacer grandes excursiones a caballo.
En la madrugada, cerca de las cuatro, oía chirriar los pesados portones, entraba el carruaje en el patio, con gran estrépito, y él saltaba de la cama metiéndose los pantalones.
Pero ¡ni lo bueno es nuevo, ni lo nuevo es bueno! Sí, joven, no hay que tomarlo a broma o a engreimiento mío con las cosas antiguas: en esos pesados volúmenes está la ciencia, la verdadera ciencia.
Tras ella, formando una pareja silenciosa, marchaban el cochero y la criada: un mocetón de rostro carrilludo y afeitado que respiraba brutal jocosidad, luciendo con tanta satisfacción como embarazo los pesados borceguíes, el terno azul con vivos rojos y botones dorados y la gorra de hule de ancho plato, y a su lado una muchacha morena y guapota, con peinado de rodete y agujas de perlas, completando este tocado de la huerta su traje mixto, en el que se mezclaban los adornos de la ciudad con los del campo.
Trotaban, arrastrando los pesados armatostes, las docenas de muías gordas y lustrosas salidas de las cuadras de los molinos, con los rabos encintados, las cabezas adornadas con vistosas borlas y entre las orejas tiesos y ondulantes penachos.
La muchedumbre, endomingada, agitábase en torno de las , admirando una vez más las carrozas tradicionales que todos los años salían a luz: pesados armatostes lavados y brillantes, pero con cierto aire de vetustez, luciendo en sus traseras, cual partida de bautismo, la fecha de construcción: el siglo XVII.
Estos caminos son muy bonitos, lindísimos, y ¡muy pesados! ¡Qué cuestas! ¡Qué desfiladeros! Pero ¡qué paisajes! Tú, que eras tan afecto a todas estas cosas, quedarías encantado.
Oyéronse pasos otra vez, pero eran muy pesados y los acompañaba un carraspeo y resoplido de persona madura, por lo que nadie creyó fuera Fortunata la que llegaba.
Levántate, por tu vida, y desvíate algún trecho de aquí, y con buen ánimo y denuedo agradecido date trecientos o cuatrocientos azotes a buena cuenta de los del desencanto de Dulcinea, y esto rogando te lo suplico, que no quiero venir contigo a los brazos, como la otra vez, porque sé que los tienes pesados.

© Todos los derechos reservados Buscapalabra.com

Ariiba