Ejemplos con materialistas

Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.

Los materialistas no saben cómo afectan los cuerpos al espíritu.
El Johrei, la Agricultura Natural, lo Bello y el Sonen son prácticas básicas de esa filosofía, capaces de transformar a las personas materialistas en espiritualistas y a las egoístas en altruistas, restituyendo al planeta su equilibrio original.
Las interpretaciones más materialistas de la ley de la atracción han sido criticadas por la comunidad científica, la cual está en contra del uso deliberado de el término científico ley, y por algunos de los proponentes del movimiento de la Nueva Era y la espiritualidad en general.
Va más lejos incluso que los poetas materialistas seguidores del socialismo o comunismo que lo atacaran durante el nazismo, pues lejos de cantar al pueblo odas totalmente inútiles y falsas que enajenan más que liberan, Benn proclama la abslouta independencia y validez de la obra de arte por encima de su creador, liberándola de toda carga ideológica, otorgándole un valor absoluto, y entregándole al lector una responsabilidad que ningún otro poeta le había dado: la responsabilidad lectora en su más elevado sentido.
¡El alma! Estos señores materialistas creen que con variar el nombre a las cosas han vuelto el mundo patas arriba.
¡Nada faltaba allí! A los tratados heréticos de Arnaldo de Vilanova y Miguel Servet, médicos entrambos, seguían los materialistas del siglo pasado: Dupuis, Holbach, La Mettrie y Cabanis, y a éstos y a otros tales, los positivistas contemporáneos como Comte, Littré, Stuart Mill, Bain, Herbert Spencer y algunos más ''ejusdem fúrfuris'', y en lugar preferente y más al alcance de la mano, ostentábanse la ''Antropogenia'', de Haeckel, la ''Historia del desarrollo intelectual y los Conflictos'', de Draper, ''Fuerza y Materia'', de Büchner, ''Pensamientos sobre la muerte'', de Feuerbach, y ''La razón pura'', de Kant, con otras razones no menos al caso, de otros tales filósofos críticos.
Aparte de la deferencia a los materialistas del Congreso que esta prudente distinción revela, la fórmula es admirable desde otro punto de vista.
Una joven de quince años, catorce oficialmente, se adelantó, y colocada cerca de la mesa recitó con desparpajo una filípica un tanto moderada por los eufemismos de la retórica jesuítica, contra los materialistas modernos, que negaban la inmortalidad del alma.
Seguramente los materialistas no aceptarán estas explicaciones.
Tanto las teorías materialistas como las espiritualistas han llevado a muchos ilusos al manicomio.

© Todos los derechos reservados Buscapalabra.com

Ariiba