Ejemplos con marchante
Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.
Elmyr pintaba los cuadros sin firmar y es posible que su marchante pusiera las firmas.
Por sus manos han pasado corredores como Alberto Contador o José Ángel Gómez Marchante, entre muchos otros.
Picasso se interesó por su pintura y le buscó a la marchante María Cuttoli para que se ocupase de darlo a conocer.
Durante casi una década de estancia en la capital italiana centró su actividad en la creación de óleos, sobre todo de acuarelas, que, gracias a la intervención de Fortuny, consiguió vender al marchante francés Goupil.
Tres años después, viajó a Londres y conoció allí a Alphonse Legros, quien le puso en contacto con el marchante Durand-Ruel.
La batería marchante mas los efectos de guitarra proveñidos por Schenker dan un aire diferente y único a la canción.
De Staël firmó con Rosenberg en parte debido a que Rosenberg era francés y porque era un importante marchante de Nueva York que exponía a muchos pintores cubistas a los que Nicolas de Staël admiraba.
De Witte incumplió el contrato, y fue demandado por el marchante, viéndose forzado a obligarse más aún como resultado.
Durante tres años trabaja para un marchante, Julio Santos, que vende su pintura a particulares en la Península y monta exposiciones en América.
Fue una injusticia y una explicación absurda, se revela ante tal hecho y nace La Revolución del Silencio, movimiento al que se han añadido innumerables artistas, que van desde Japón hasta España, desde Perito Moreno, hasta Islandia, todos ellos válidos en su quehacer diario, en su Oficio, en su Genialidad pero que no han tenido un marchante de arte de prestigio, sólo están a la espera que años o siglos después se les valore como merecen, para entonces, en la mayoría de los casos será tarde.
Clara es una inspectora de sanidad e Israel es un marchante que vende hierbas en un mercado de la Ciudad de México.
Lindsay es una marchante de arte que procede de una acomodada familia WASP que no acepta su condición de lesbiana.
Brian también se convierte en padre esa misma noche, del niño de su mejor amiga, Lindsay, una marchante de arte lesbiana, y de su pareja, Melanie, una abogada que detesta a Brian tanto como Lindsay le quiere.
Después de regresar a París, de Staël conoció al marchante neoyorquino Paul Rosenberg quien le ofreció un contrato en exclusiva.
Allí más animación, más vida, gentes que iban y venían, el alumbrado público, faroles con lámparas de petróleo, que solo servían para dejar que se viese la obscuridad, jinetes que volvían de las haciendas y de los pueblos cercanos, un almacén de ultramarinos, EL PUERTO DE VIGO, iluminado profusamente, centelleando en las botellas, en los frascos y en las latas de sardinas el reflejo de los quinqués, una botica soñolienta, hipnotizada por sus reverberos y sus aguas de colores, la botica de don Procopio Meconio, delante del mostrador un marchante en espera, detrás un mancebo que hacía píldoras, y en la puerta el dueño, de charla con un amigo.
-¿Tiene usted tachuelas? -pregunta un marchante acercándose al empolvado mostrador.
Voy a liar los cortes enseguiíta, no sea cosa de que, por parte del demonio, vaya a venir el otro marchante.
-¿Y cómo voy yo a dejar plantao a otro marchante casi tan bueno como tú? Por más que el otro me dijo que mandaría por él al día siguiente, y la verdá es que yo quisiera darte gusto a ti, porque tú eres un buen parroquiano y no compras más que en mi tienda.
Tuvo José sus momentos de angustias y zozobras, porque llegó día en que no consiguió un solo marchante.
Las coplas del célebre León Marchante, dulce estudio de los barberos, las del cura de Fruime, Gerardo Lobo, la madre Ceo, Boscán y Garcilaso a lo divino, Jacinto Polo, Cáncer, Benegasi, Villamediana, Bocángel, Tafalla, Zabaleta, Montoro y Salas Barbadillo, con el Arte de Gracián y las comedias, silvas y romances de Henríquez Gómez.
