Ejemplos con diviértete
Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.
Pistolas de agua Anaconda Diviértete mojando a los visitantes que estén montados en la montaña rusa acuática Anaconda.
El vivo retrato de mi pobre finada Diviértete, que tu abuelo está aquí con sus pesos.
Diviértete con ella en un país remoto, y no vuelvas hasta después que haya entrado don Amadeo, pues aunque muchos creen que entrará aquí como en su casa, a mí me da el corazón que antes o después de la entrada tendremos una bella catástrofe.
Vete a pasear diviértete, que bastante habrás trabajado desde que te fuiste.
¿Por qué había yo de privarle de nada, cuando está en la edad de gozar y de divertirse? Goza y diviértete, pues, mientras te duran la salud y la mocedad, que ya vendrán para ti, como han venido para todos nosotros, los días de los disgustos y de los pesares.
Nada, hijo, diviértete, cuídate, busca más.
Entonces exclamé: ¡Oh! ¡Sólo hay fuerzas y recursos en Alah Altísimo y Omnipotente! Pero tú ¡oh, ser humano! vete a buscar a tus amigos, diviértete con ellos cuanto quieras, y déjame marchar en busca de los míos, que a esta hora precisamente esperan mi llegada.
Ve y diviértete, y si quieres puedo traerte un disfraz de enamorado, por si es el que buscas.
Anda, diviértete.
¡Diviértete, caramba! Así debe llevarse este negocio.
Y obrad en todo conforme a las indicaciones de este gran maestro tintorero, observad puntualmente sus órdenes ¡y guardaos de desobedecerle en nada, ni siquiera con un gesto! Luego el rey regaló a Abu-Kir un hermoso ropón de honor y una bolsa con mil dinares, diciéndole: ¡Diviértete con este dinero en tanto está lista la nueva tintorería! Y le regaló, además, dos mozos jóvenes para su servicio y un maravilloso caballo enjaezado con una hermosa silla de terciopelo azul y una gualdrapa de seda del mismo color.
En cuanto lleguen las brisas de otoño, que avivan la natural frescura y alegría de los madrileños, diviértete lo que puedas.
— Pues bien - dijo -, diviértete en destrozarle el corazón.
Es necesario estar con cuidado, tú, vete con ella, y estate muy tranquilo, y diviértete, vale -añadió, guiñándole el ojo y riéndose maliciosamente-, que yo quedo velando.
