Ejemplos con diferente

Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.

No será sin que antes le demuestre yo, con una prueba sencillísima, todo lo importuno que ha sido su enojo, todo lo inconveniente que ha sido su conducta, ya que no se lo ha dado a entender la muy diferente y digna que han observado otros señores comerciantes que se hallan aquí presentes.
No están tristesrespondió Lucía, están pensativas, que es cosa muy diferente.
El mar es muy diferente de la tierra, y de otro respeto, Señor Don Juan Manuel.
Acisclo: pero, viendo lo convencido que él estaba de que no era otra cosa, y notando además que Pepe Güeto y su mujer no distaban mucho de pensar como don Acisclo, no quiso predicar en desierto ni tratar de convencerlos de que el verdadero concepto de la política era muy diferente.
Esta veneración se extendía, o mejor dicho, se extremaba y llegaba a su colmo, sin afectación ni servilismo, cuando se trataba de la señorita doña Luz, en quien, fascinado el viejo, creía descubrir a un ser cuyos arcanos pensamientos, móviles y resortes de acción, apenas entreveía, a una criatura rara e inusitada, de otra casta muy diferente de la suya, y con la cual, sin embargo, comía de diario y tenía la honra de compartir la vivienda.
Estas advertencias dicen en resumen que el cortesano enderece su deseo a la hermosura sola, y cuanto más pueda la contemple en ella misma simple y pura, y dentro en la imaginación la forme separada de toda materia, y formándola así la haga amiga y familiar de su alma, y allí la goce, y consigo la tenga días y noches en todo tiempo y lugar sin miedo de jamás perdella, acordándose siempre de que el cuerpo es cosa muy diferente de la hermosura, y que, no solamente no la acrecienta, mas que le apoca su perdición.
Esta época, amigo Antonio, es muy diferente de la nuestra.
Finalmente, con parecer del conde mi pariente, y del de los religiosos, despues de quince dias que estuvimos escondidos en el monesterio, mi camarada en hábito de fraile con otro fraile se fué la vuelta de Aragon, con intencion de pasarse a Italia, y desde allí a Flándes, hasta ver en qué paraba el caso: yo quise dividir y apartar nuestra fortuna, y que no corriese nuestra suerte por una misma derrota: seguí otro camino diferente del suyo, y en hábito de mozo de fraile, a pié salí con un religioso que me dejó en Talavera, desde allí a aquí he venido solo y fuera de camino, hasta que anoche llegué a este encinar, donde me ha sucedido lo que habeis visto: y si pregunté por el camino de la Peña de Francia, fué por responder algo a lo que se me preguntaba, que en verdad que no sé dónde cae la Peña de Francia, puesto que sé que está mas arriba de Salamanca.
—Si los pintores que ordinariamente suelen ser pródigos de la hermosura con los rostros que retratan, lo han sido tambien con este, sin duda creo que el original debe de ser la misma fealdad, a la fe, señora y madre mia, justo es y bueno que los hijos obedezcan a sus padres en cuanto les mandaren, pero tambien es conveniente y mejor que los padres den a sus hijos el estado de que mas gustaren, y pues el del matrimonio es ñudo que no le desata sino la muerte, bien será que sus lazos sean iguales y de unos mismos hilos fabricados: la virtud, la nobleza, la discrecion y los bienes de la fortuna bien pueden alegrar el entendimiento de aquel a quien le cupieron en suerte con su esposa, pero que la fealdad della alegre los ojos del esposo, paréceme imposible: mozo soy, pero bien se me entiende que se compadece con el sacramento del matrimonio el justo y debido deleite que los casados gozan, que si él falta, cojea el matrimonio y desdice de su segunda intencion, pues pensar que un rostro feo, que se ha de tener a todas horas delante de los ojos en la sala, en la mesa y en la cama, pueda deleitar, otra vez digo que lo tengo por casi imposible: por vida de vuesa merced, madre mia, que me dé compañera que me entretenga y no enfade, porque sin torcer a una o a otra parte, igualmente y por camino derecho llevemos ambos a dos el yugo donde el cielo nos pusiere, si esta señora es noble, discreta y rica, como vuesa merced dice, no le faltará esposo que sea de diferente humor que el mio: unos hay que buscan nobleza, otros discrecion, otros dineros, y otros hermosura, y yo soy destos últimos, porque nobleza, gracias al cielo y a mis pasados, y a mis padres, ellos me la dejaron por herencia, discrecion, como una mujer no sea necia, tonta o boba, bástale que ni por aguda despunte ni por boba no aproveche, de las riquezas, tambien las de mis padres me hacen no estar temeroso de venir a ser pobre: la hermosura busco, la belleza quiero, no con otra dote que con la de la honestidad y buenas costumbres, que si esto trae mi esposa, yo serviré a Dios con gusto y daré buena vejez a mis padres.
Lo mismo hizo el ventero, pero con intención diferente, porque fue a castigar a la moza, creyendo sin duda que ella sola era la ocasión de toda aquella armonía.
Par Dios, señor replicó Sancho, ya yo los he tocado, y este diablo que aquí anda tan solícito es rollizo de carnes, y tiene otra propiedad muy diferente de la que yo he oído decir que tienen los demonios, porque, según se dice, todos huelen a piedra azufre y a otros malos olores, pero éste huele a ámbar de media legua.

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