Ejemplos con casero

Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.

Las imágenes del tráiler fueron grabadas con una cámara de mano para que se asemejara a un vídeo casero.
Navarro García fue un hombre entusiasta y organizador, le fue encargado la fabricación de bombas de tipo casero para la lucha suriana.
Para un jardinero casero comprar un eucalipto de flor roja del vivero es toda una aventura: porque podría no ser ficifolia, y el color de la flor no se ha domesticado en verdad -no hay manera de averiguar que color las flores adquirirán después de plantar un arbolito y hay que esperar hasta que alcance su madurez.
Visten los viejos todos lo mismo: trajes de sayal, color franciscano, de paño casero, tejido en los telares, a brazo, del Hospicio provincial por los nacidos anónimos para los muertos anónimos.
Indudablemente la llevaba a solas, como un gorro casero.
Era que se iba a celebrar la fiesta de la literatura lemosina, en la que desempeñaba siempre un primer papel: vate premiado, discurseante, o simple ídolo, al que tributaban sus elogios otros poetas, clérigos dados a la rima, encarnadores de imágenes religiosas, tejedores de seda que sentían perturbada la vulgaridad de su existencia por el cosquilleo de la inspiración, toda una cofradía de vates populares, ingenuos y de estro casero, que recordaban a los Maestros Cantores de las viejas ciudades alemanas.
También hablaba de familiares de la Inquisición, recordando a los curas gordos y morenos que salían de la iglesia, en busca del casero chocolate, luego de decir su misa.
Había muchas señoras que iban a visitarla, sólo por enterarse de su tocado casero.
Un viejo casero hablaba a sus amigos en vascuence a espaldas del doctor.
Es como si a mí, que estoy acostumbrado al pucherete casero, me llevasen hoy a la mesa de Su Eminencia.
y despertaba, despertaba no bien había pegado los ojos, como si algún importuno le empujara de improviso, con pesadillas horribles en que los más ligeros ruidos tomaban proporciones colosales, pareciéndole el rumor del tren el de una catarata de bronce fundido que se despeñase en sus orejas, el de los cascabeles de un coche, redobles de mil tambores golpeando en sus propios tímpanos, el chirrido peculiar de las carretas vascongadas, el que avisa al casero vasco en las revueltas del camino, un ruido del infierno que por diabólico prodigio se encarnase en una sierra candente y le dividiera la masa de los sesos mitad por mitad Así pasó la noche, un poco antes del alba desapareció el sopor, huyó el letargo con sus pesadillas, y un sueño tranquilo le adormeció entre sus brazos más de dos horas.
La mamá mostrábase con él amable y cariñosa como jamás la había visto, tenía arranques de lirismo casero, se enternecía reuniendo toda la familia en la mesa, y él, por no contrariarla, permanecía en Burjasot, víctima de las contradicciones de su carácter, tan pronto atraído por la querencia a la cocina, como pensando en Tónica con la dulce nostalgia del enamorado.
Recorriendo el cuarto, pensó que si el casero se conformaba a hacer algunas reparaciones, no quedaría mal.
Por eso, naturalmente, nos hemos atrasado tanto, y lo poco que se apaña se lo birla el casero.
No se veía al marqués casi nunca, desde el nacimiento de la niña, en vez de mostrarse más casero y sociable, volvía a las andadas, a su vida de cacerías, de excursiones a casa de los abades e hidalgos que poseían buenos perros y gustaban del monte, a los cazaderos lejanos.
¿Tendré tiempo de ir a Castrodorna? La hija de Felipe el casero, aquella mocetona, ¿no sabe usted?.
¿No es un acto abusivo traerla aquí de la trenza, porque es hija de un casero? Naturalmente que a usted no se lo parece, claro está.
¿Cuándo se convencerán estos señoritos de que un casero no es un esclavo? Así andan las cosas de España: mucho de revolución, de libertad, de derechos individuales.
A mí no me levanta la voz un casero mío.
Finalmente, despues del sermon que llamaremos , el buen padre Cura se levantó del sillon de baqueta que le habia servido de cátedra, y, descendiendo al estilo llano y pedestre, por si el jóven se habia quedado en ayunas, díjole a manera de corolario casero:.

© Todos los derechos reservados Buscapalabra.com

Ariiba