Ejemplos con bulla

Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.

Desde ese puesto de avanzada sentíamos la bulla de la soldadesca ebria del infeliz pueblo de Chorrillos.
Se les vincula con los cetáceos por sus oídos: la estructura de la bulla auditiva se forma únicamente a partir del hueso ectotimpánico, lo cual es muy inusual y sólo se asemeja a la de los cráneos de cetáceos, esta característica es definitoria de los cetáceos y no se halla en ningún otro mamífero.
En el centenario del nacimiento del cantante republicano Angelillo, por Pepe Luis López Bulla,.
Como no se podía exponer a los chicos a un terrible tropiezo en los caminos infestados, la escuela se cerró, y la carretera, ya sin tráfico, privada de este modo de la bulla escolar que animaba su desamparo, a las siete y a las doce, adquirió lúgubre silencio.
Otra vez la bulla, el vocerío, el cerrar de libros y el estrépito de gavetas.
Las nueve serían de la siguiente, cuando entró en el establecimiento de la Plaza de Antón Martín, que lleno de gente estaba, con una atmósfera espesa y sofocante que se podía mascar, y un ensordecedor ruido de colmena, bulla y ambiente que soportan sin molestia los madrileños, como los herreros el calor y el estrépito de una fragua.
Iba Jacinta tan pensativa, que la bulla de la calle de Toledo no la distrajo de la atención que a su propio interior prestaba.
Torquemada procuraba pacificar, y entre unos y otros molestaban mucho al enfermo con la bulla que hacían.
Se le llevaron en burlesca procesión, él delante, aislado por su propio tizne, y ya con la dignidad tan por los suelos, que empezaba a dar , los chicos detrás haciendo una bulla infernal, y la tarasca aquella del moño lacio amenazándolos con si no se quitaban de en medio.
Cogidos los palillos uno en cada mano, empezó a dar porrazos sobre el parche, corriendo por aquellos muladares, envidiado de los demás, y sin ocuparse de otra cosa que de meter toda la bulla posible.
En el comedor continuaba la bulla, pero los ánimos estaban más serenos.
Dicho crucero era como un segundo departamento del café, y estaba invadido por estudiantes, en su mayoría gallegos y leoneses, que metían una bulla infernal.
El sonido se le escapaba, como si el mundo todo con su bulla y las palabras de los hombres se hubieran ido más lejos.
Entonces empezaron a danzar en su fantasía los sucesos todos de la jornada: el caballejo que estuvo a punto de hacerle besar el suelo, la cruz negra que le causó escalofríos, pero sobre todo la cena, la bulla, el niño borracho.
Pedro, es tal el jaleo y la bulla dentro de la casa, que no se puede parar allí, y lo más escandaloso y horrible es que las noches de Jueves y Viernes Santo armaron tal gresca, que aquello parecía un infierno.

© Todos los derechos reservados Buscapalabra.com

Ariiba