Ejemplos con bajando

Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.

Cabalgaron también los otros cinco auxiliares, y bajando callejones, y resbalando sobre lastras, y vadeando regatos, salieron a una senda que se llamaba , por el que continuaron su marcha a obscuras, porque es de advertir que había anochecido una hora antes, y además caía una lluvia menudita que enfriaba hasta los huesos.
Faltaban dos días para vencer los primeros giros que había hecho a cargo de su misma casa, y seguía bajando desastrosamente el papel en que había invertido aquellos fondos, cuando recibió el siguiente lacónico telegrama de su apoderado:.
Hecho lo cual, se sentó en el rincón, y bajando el vidrio, respiró con ansia el vivificante fresco matinal.
Sí, señor y huérfana de madre desde que era asíexplicó Lucía bajando la extendida mano y colocándola a la altura de sus rodillas.
Pues sí, señorito, yo por aquí dijo recalcando la frase y bajando la voz, como todo lo mío lo encontré arrasado la casa hecha cenizas, y el campo perdido me di a ganar la vida como pude.
A este nombre, que ninguna voz humana había hecho resonar en sus oídos por tanto tiempo, Lucía se encendió y se puso como una guinda, y bajando los ojos, murmuró:.
Se pone usted malo, y para esto no era preciso que se molestase bajando a verme.
Hasta la luz del sol parecía lúgubre bajando al fondo de este barranco tamizada por una áspera vegetación y reflejándose pálidamente en las aguas muertas.
Miró a su hija, que enrojecía bajando los ojos.
De entender lo contrario por espíritu democrático, se seguiría que lo que debemos desear es la igualdad bajando y no subiendo: la nivelación en la ignorancia, la abyección y la miseria, y no la nivelación y elevación posibles, en todos aquellos medios, en toda aquella acumulación de recursos hecha por las pasadas generaciones, a fin de que con su auxilio sigamos ascendiendo hacia el bien, hacia la luz y hacia la belleza.
Don Juan subrayó con tanta expresión estas palabras, que su hermana dio un paso atrás, palideciendo y bajando las amenazantes manos.
Sonrió dulcemente, y me respondió, bajando la mirada:.
Es lo que deseomurmuré, bajando la vista, mientras el abogado me miraba de hito en hito.
No sé, veremos lo pensaré todavíabalbució ella cortadísima, bajando los ojos.
Y lo que más me subleva es tu terquedaddijo doña Lupe bajando la voz, y ese empeño de gobernarte sola, sí, esa independencia estúpida Tú te lo guisas y tú te lo comes.
La señora de Rubín no se dio cuenta de lo demás Tenía después una idea incierta de que la mano dura del inglés la había cogido por un brazo, apretándoselo tanto que aún le dolía al día siguiente, de que la sacaron del gabinete, de que le abrieron la puerta y de que se vio bajando la escalera.
Mejor me he convencido de que vivir es la mayor de las sandecesle dijo él, bajando la escalera.
Bajando por la calle Imperial, en dirección al gran pelmazo de gente que se ha formado, viene Juanito Santa Cruz.
Con exquisito cuidado, más con gran decisión, empuñó la custodia bajando con ella por una escalera que antes no estaba allí.
La luna nueva se puso temprano, bajando al horizonte como una hoz, rodeada de aureola blanquecina que anunciaba más calor para el día siguiente.
Por fin se oyeron las botas chillonas del ex-alabardero bajando la escalera, y doña Lupe reapareció en el gabinete.
En las carnicerías sonaban los machetazos con sorda trepidación, y los platillos de las pesas, subiendo y bajando sin cesar, hacían contra el mármol del mostrador los ruidos más extraños, notas de misteriosa alegría.
Porque todo se puede conllevardijo Ido bajando la voz lúgubremente, menos la infidelidad conyugal.
El prosiguió Ido tomándose más confianza y bajando más la voz, es un nene de tres años, muy mono por cierto, hijo de una tal Fortunata, mala mujer, señora, muy mala Yo la vi una vez, una vez sola.
Avanzó algunos pasos dentro del recibimiento, y bajando la voz dijo a la señorita:.
Bajando la cabeza, se atravesó en la entrada del hórreo, y por espacio de algunos minutos defendió su presa haciéndole muralla con el cuerpo.
En resolucion, bajando la isla, de allí a cuatro dias descubrieron la Lampadosa, y luego la isla donde se perdieron, con cuya vista se estremeció Leonisa, viniéndole a la memoria el peligro en que ella se habia visto: otro dia vieron delante de sí la deseada y amada patria, renovóse la alegría en sus corazones, alborotáronse sus espíritus con el nuevo contento, que es uno de los mayores que en esta vida se pueden tener, llegar despues de luengo cautiverio salvo y sano a su patria, y al que a este se le puede igualar es el que se recibe de la victoria alcanzada de los enemigos.
En repetir las palabras de los mozos y en remedar y contrahacer el modo y los ademanes con que las decian, entretuvieron el camino hasta Toledo, y luego siendo la guia Carriazo, que ya otra vez habia estado en aquella ciudad, bajando por la Sangre de Cristo, dieron con la posada del Sevillano, pero no se atrevieron a pedirla allí, porque su traje no lo pedia.
Apénas me hubo visto uno de tres pastores que el ganado guardaban, cuando diciendo, to to, me llamó, y yo, que otra cosa no deseaba, me llegué a él, bajando la cabeza y meneando la cola: trújome la mano por el lomo, abrióme la boca, escupióme en ella, miróme las presas, conoció mi edad, y dijo a otros pastores, que yo tenia todas las señales de ser perro de casta.
Tornó a tomar su báculo el deudor, y, bajando la cabeza, se salió del juzgado.

© Todos los derechos reservados Buscapalabra.com

Ariiba