Ejemplos con alegrabais

Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.

Adiós, Atienza, ruina gloriosa, hospitalaria, adiós, santa madre mía, adiós, , que me hicisteis vuestro , adiós, amigos míos, curas de San Juan, San Gil y la Trinidad, adiós, Teresita Salado, Tomasa y chiquillos que alegrabais nuestras tardes, adiós, paz y recreo del campo, simplicidad de costumbres, adiós, sombra del grande y misterioso Miedes, el de la locura graciosa y sublime, el soñador celtíbero, enamorado de la más bella representación del alma hispana, adiós, en fin, imagen de la errante Lucila, mentira de la realidad y verdad casi desnuda que pasaste como un relámpago de hermosura entre el polvo de los deshechos terrones.
Madrid nos llama y Atienza nos despide, pues mi propia madre, que no se cansa de tenernos a su lado ni de prodigarnos su inextinguible cariño, reconoce que es hora de que ella torne a Sigüenza y nosotros a la Villa y Corte, con todas las precauciones imaginables y cien más, y aún es poco, porque... hace días anduvieron ella y María Ignacia en secreteos, y según parece, ya no hay dudas respecto a lo que más deseamos todos, esposo y padres... ¡Ay, Dios mío! El temor de un fracaso, que ahora no sería imaginario como en los días de nuestra llegada, inspira a mi señora madre las más audaces previsiones y los planes más peregrinos respecto a viaje, método y pausas con que debemos realizarlo, estructura y acomodos del coche, limpieza y monda de piedras en todos los caminos que hemos de recorrer... Pronto a partir, precisado me veo a poner fin a estas páginas trazadas al descuido y como a hurtadillas en la polvorosa madriguera del erudito atenzano. ¿Pluma de estas Confesiones, cuándo volveré a cogerte?... Adiós, Atienza, ruina gloriosa, hospitalaria, adiós, santa madre mía, adiós, Noble Hermandad de los Recueros, que me hicisteis vuestro Prioste, adiós, amigos míos, curas de San Juan, San Gil y la Trinidad, adiós, Teresita Salado, Tomasa y chiquillos que alegrabais nuestras tardes, adiós, paz y recreo del campo, simplicidad de costumbres, adiós, sombra del grande y misterioso Miedes, el de la locura graciosa y sublime, el soñador celtíbero, enamorado de la más bella representación del alma hispana, adiós, en fin, imagen de la errante Lucila, mentira de la realidad y verdad casi desnuda que pasaste como un relámpago de hermosura entre el polvo de los deshechos terrones... adiós, adiós, adiós... Ved aquí las últimas plumadas, las últimas sin remedio, porque tengo que sellar y empaquetar cuidadosamente estos papeles para llevármelos bien guardaditos... No más, no más... Hasta que Dios quiera.

© Todos los derechos reservados Buscapalabra.com

Ariiba