El sustantivo, clases de sustantivos
El sustantivo o nombre es aquella palabra que varía en función de su género o número y se utiliza para nombrar a personas (ejemplos Pedro, Óscar), animales (león, elefante, gato), cosas (mesa, ordenador, televisión) o ideas (libertad, esperanza). Dentro de la oración pueden tener diferentes funciones. Por lo general, el sujeto debe ser un sustantivo o ser sustituido por un sustantivo, pero también puede ejercer de diferentes complementos.
Flexión del sustantivo
Llamada flexión o declinación, el sustantivo puede adoptar varias formas morfológicas en función de categorías gramaticales como el número, el género. En cuanto al número gramatical es bastante común en el castellano y servirá para la distinción entre el singular y el plural la distinción entre el número singular y el plural, aunque también hay lenguas sin número o incluso palabras en español que no se flexionan. En cuanto al género, distingue para sustantivos que se refieren a personas y cosas y diferenciarlas de masculino y femenino. Como ejemplo de sustantivo que flexiona tanto en género como en número es gato, con gata en femenino y gatos y gatas en plural.
Función gramatical dentro de la oración
El sustantivo puede desempeñar diferentes funciones dentro de la oración. Puede ser el núcleo del sintagma nominal, que a su vez cumple función sintáctica como sujeto, complemento directo, complemento indirecto, atributo, suplemento, complemento circunstancial, aposición o término de preposición.
Por ejemplo, como núcleo del sujeto: La niña va a la escuela. Como atributo: Me gusta el color verde mar. Como complemento directo: Me he comprado un coche nuevo. En cuanto a aposición: Ese río, el Tajo, Madrid, la capital. Como complemento predicativo: La asamblea ha elegido presidente a Pedro.
Tipos de sustantivos
Según el género, los sustantivos se pueden clasificar en masculinos o femeninos. El género masculino se determina añadiendo la terminación -o. También anteponiendo los artículos el o un, aunque hay algunas excepciones: la fotografía o la mano. El género femenino se determina como normal general añadiendo la terminación -a o anteponiendo los artículos la o una, aunque hay excepciones.
Según su número, los sustantivos pueden ser singulares o plurales. Si el número de objetos a los que hace referencia es uno serán singulares. Son plurales si los sustantivos se refieren a más de un objeto, persona, cosa, idea...
Según la naturaleza, los sustantivos pueden ser comunes. Es decir, agrupan a personas, animales o cosas de la misma clase u objetos de similares características: hombre, caballo, casa. Serán propios si se refieren a una persona o animal determinado: Pedro o Carlos.
Además pueden ser concretos, si se pueden percibir con un sentido: niño, reloj, mesa... O pueden ser abstractos, no se perciben con los sentidos: odio, virtud, honradez...
Según la forma habrá sustantivos individuales porque se refieren a una persona, animal o cosa en su forma singular; o colectivos, pese a estar en singular pueden referirse a un conjunto: bosque, plumaje, piara...
Según la composición hay sustantivos simples o compuestos. Los simples están formados por una sola palabra: taza. Los compuestos los forman la unión de dos palabras simples:anteojos, cascanueces.
Según su origen habrá sustantivos primitivos, sin una terminación que pueda cambiar o derivados, surgidos añadiendo terminaciones a sustantivos primitivos. Por ejemplo: ruidazo, viejecita.
Según la vida habrá sustantivos animados e inanimados y según la contabilidad, contables o incontables, es decir, entes que se puedan contar o no.